La Patrona, Nuestra Señora del Rosario Coronada, y el Regidor Perpetuo de la ciudad, Nuestro Padre Jesús Nazareno, protagonizaron ayer una histórica jornada por las calles de Cádiz, saliendo conjuntamente en procesión extraordinaria tras participar de una Santa Misa presidida por el obispo de la Diócesis, Rafael Zornoza, en la SAI Catedral de Cádiz, con la que se dio gracias a Dios y a la Santísima Virgen por la protección dispensada en los últimos tiempos a la ciudad.
Para el traslado, tanto el paso de la Patrona como el del Regidor Perpetuo junto con Santa María Magdalena iniciaron su recorrido desde sus respectivos templos a las 09.30 horas, encontrándose ambos en la Plaza San Juan de Dios.
La Virgen del Rosario lució radiante y bien distinta a como suele procesional en su festividad del 7 de octubre o en el Corpus. Sorprendió con un terno azul bordado en plata realizado por el artista gaditano Miguel Ángel Franco. Tanto la Patrona como el niño que porta en su regazo lucieron las coronas de oro de la coronación canónica (1947). Nuestro Padre Jesús Nazareno asomó por la puerta de su capilla, en la Iglesia Conventual de Santa María, recorriendo calle Santa María, Jabonería, San Juan de Dios, Pelota y Plaza de la Catedral. La llegada a la SAI Catedral se realizó a las 10.30 horas.
Durante este trayecto ninguno de los pasos contaron con acompañamiento musical. Una vez situadas las imágenes en el interior del primer templo diocesano, se procedió a la Eucaristía de la inmaculada. Una misa que fue presidida por el obispo. La ceremonia dio comienzo a las 12.00 horas ante la asistencia de cientos de personas que quisieron estar presente en este acontecimiento inédito para la iglesia gaditana. Zornoza pidió por la erradicación de la pandemia y recordó a todas las víctimas que perdieron su vida a consecuencia del Covid.
Por la tarde, el recorrido de vuelta se inició con la salida a las 17.30 horas del cortejo procesional con el paso de la Virgen del Rosario primero y posteriormente el de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Nuestro Padre Jesús Nazareno recorrió el siguiente itinerario: Arquitecto Acero, Plaza de la Catedral, Cobos, Cristóbal Colón, Nueva, Plaza de San Juan de Dios, Sopranis, Compás de Santo Domingo, Botica, Concepción Arenal y Santa María. La imagen del Señor entró en el interior de su iglesia en torno a las doce de la noche.
Por parte de la Cofradía del Nazareno de Santa María hizo su estreno como capataz principal del paso de misterio Joaquín Cortés Molina, cuya elección fue aprobada en junio de 2019. Y junto a él estuvo también el capataz del palio, Antonio Ramírez Durán. En cuanto al paso de la Virgen del Rosario, volvió a repetir el habitual equipo que dirige el hermano de la Archicofradía Juan Pidre Alonso.
La Virgen del Rosario fue acompañada de la banda musical del Maestro Dueñas, de El Puerto, mientras que tras el paso del Regidor Perpetuo sonaron los sones de la Agrupación Musical Jesús Cautivo de Estepona.
La cofradía junto con la propia Agrupación Musical coordinaron un callejero de marchas, que se inició en la salida con la interpretación de La Saeta tras la Marcha Real, con la que el Regidor Perpetuo concluyó su salida procesional extraordinaria antes de la entrada en su templo.
En el apartado musical, el callejero de marchas configurado se complementó con el itinerario flamenco cerrado por la corporación, con la actuación de tres grupos de Cádiz: Flamencos de la Tata en la calle Compás de Santo Domingo en el momento de la recogida de la Patrona de Cádiz; Jóvenes Flamencos del Barrio Santa María, en la calle Concepción Arenal frente a la Casa de Iberoamérica; y Cai por Navidad en la calle Santa María, en la recogida del Regidor Perpetuo.
El equipo de mayordomía de la Cofradía del Nazareno dispuso a la imagen de Jesús Nazareno luciendo para la ocasión una túnica bordada de cola en tonos guinda, bordada en los talleres de Fernández y Enríquez en Brenes, que fue donada por un grupo de hermanos y hermanas en el año 2016 durante la conmemoración de la efeméride del 400º aniversario de la llegada de la Cofradía al Monasterio de Santa María. Por su parte, Santa María Magdalena vistió túnica en tono granate con bordados enriquecidos en hilo de oro, realizada en el año 1989. Y sobre la túnica, un manto de terciopelo color morado y pecherín de pliegues naturales en lamé francés en tonos dorados. Nuestro Padre Jesús Nazareno procesionó con su habitual cruz procesional, una obra anónima del siglo XVII realizada en carey con añadiduras en el siglo XVIII de la orla de plata en estilo rococó que perfila sus ángulos.
Una jornada inédita de momentos cofrades en la que no faltó la emoción, el cante flamenco ni el público de Cádiz arropando a sus grandes devociones.
