A comienzos del mes de octubre y coincidiendo con la finalización del año agrícola, como refleja el Reglamento de Hazas, se cobran las rentas de las Hazas que se sortean entre la población. En este sentido, el pasado año 2021 se cobró el último plazo de las rentas de los agraciados en el sorteo del año 2016, además de percibirse por parte de los premiados en el sorteo del año 2020, la cantidad correspondiente a los llamados “duros muertos”.
Ahora, toca percibir a los últimos agraciados la primera anualidad de las cuatro correspondientes. La novedad de este año, ha sido que aquellos a los que les ha tocado una Haza de las llamadas “militares”, producto de la expropiación de 1982, percibirán, por decisión de la Junta de Hazas del pasado 25 de Agosto, la cantidad global de su renta, por importe de 3.000 euros. Este abono ha sido posible, gracias al incremento de los ingresos de producción eléctrica de los parques eólicos.
No sólo esta es la única novedad en los terrenos de las Hazas, ya que la Junta tiene previsto incrementar en diez las Hazas el próximo sorteo, pasando de 124 a 134, tras regularizar los llamados “Picos de Hazas”, que son restos de terrenos expropiados en 1982 y recientemente devueltos por el Ministerio de Defensa.
Valoración
Para el presidente de la Junta de Hazas y alcalde de Barbate, Miguel Molina, “desde que entramos en la Alcaldía tuvimos claro la necesidad de poner en valor nuestro patrimonio y el mejor ejemplo son las Hazas de Suerte, por eso primero hemos regularizados los ingresos, posteriormente hemos registrado las Hazas a nombre del Común de Vecinos para blindarlas antes posibles asaltos a la propiedad de los barbateños y ahora estamos regularizando el tema de los Picos para incrementar los agraciados”.
Además, asegura Molina, “ante el importante aumento de ingresos hemos querido invertir ese dinero en el futuro de nuestros jóvenes becando sus estudios universitarios y premiando los trabajos de investigación del entorno de las Hazas”.
