Este dato refleja la fuerza y el protagonismo de la mujer gitana en su comunidad y será el impulso de la población femenina la que “va a ayudar y ser de gran utilidad para salir de la situación lamentable en la que se encuentra gran parte del pueblo gitano”.
Con estas palabras, la presidenta de la Federación Andaluza de Mujeres Gitanas Universitarias Fakali-Amuradi, Beatriz Carrillo, ha reivindicado la importancia histórica que ha tenido la mujer gitana, que ha sido la encargada de criar a los hijos y transmitir la cultura, un hecho que se repite en la actualidad, cuando “ha tocado volver a ser el motor de la familia, de su pueblo y de la sociedad”.
Es a las mujeres gitanas a quienes les ha recaído la responsabilidad de “hacer ver la importancia de la igualdad de género”, afirmó Carrillo, que destacó sobre todo la importancia de la educación para poner fin a la marginación social que sufre una parte importante de la comunidad gitana.
En España, en la actualidad hay censados un millón de gitanos, aunque en esta cifra no se incluyen los “gitanos invisibles”, aquellos que no residen en el extrarradio de las ciudades y que, por lo tanto, no se tienen en cuenta para hacer las estadísticas demográficas, tal y como ha apuntado Carrillo.
Estos “gitanos invisibles” son abogados, economistas y demás profesionales de éxito o el resto de la comunidad gitana que no se ha instalado en barrios marginales. Son precisamente estos “gitanos invisibles” quienes también pueden ayudar a romper, entre los miembros de la comunidad romaní, los estereotipos y prejuicios que tienen con respecto a los demás.