Cientos de asistentes al funeral de la ciclista profesional Estela Domínguez, fallecida tras ser arrollada por un camión el pasado jueves por la noche, se han unido este sábado al dolor de la familia de la joven, que tenía 19 años, en la Parroquia de Santa María de los Santos Mártires de Íscar (Valladolid).
Estela Domínguez perdió la vida durante uno de sus entrenamientos, en Salamanca, ciudad en la que estudiaba y a la que había llegado esta misma semana, tras participar en la Copa del Mundo disputada en Benidorm.
El funeral ha transcurrido "con toda la pena del mundo", ante el "drama" que ha ocurrido, ha explicado a EFE José Andrés Sanz, alcalde de Íscar, una localidad de unos 6.300 habitantes de la que es natural el padre de la víctima, el exciclista Juan Carlos Domínguez.
El funeral ha sido "multitudinario", la Iglesia ha estado "a rebosar", con asistencia de integrantes del mundo del deporte y de otros ámbitos, con vecinos de la localidad, donde la familia es "muy querida", ha manifestado el regidor´.
Ha detallado que quienes han acudido al templo y también posteriormente al cementerio han querido mostrar así su cariño, sentimiento y apoyo a la familia de la joven.
En Íscar, población que cuenta con una vía principal que lleva el nombre de Avenida Juan Carlos Domínguez, las banderas han ondeado a media asta y con crespones negros desde ayer vienes hasta este sábado a las 12.00 horas, cuando ha comenzado el sepelio.
Se ha perdido una vida llena de ilusiones, con 19 años, y repleta de proyección en el ámbito ciclista, ha resumido el alcalde.