Las provincias surorientales argelinas de El Ued e Illizi han sido reforzadas con efectivos militares y también con agentes de la Gendarmería Nacional y de la guardia fronteriza, indicaron las fuentes.
Los controles se han intensificado especialmente en los puestos situados en la frontera y en las carreteras que conducen a los mismos a través de esas dos regiones casi desérticas del sureste argelino.
"El Jabar" asegura que en las regiones fronterizas con Libia se ha reforzado el dispositivo de seguridad en previsión de que soldados desertores del Ejército libio o milicias partidarias de Muamar el Gadafi intenten penetrar en territorio argelino o introducir material militar.
El diario afirma que numerosos agentes de las fuerzas de seguridad libias y militares han huido hacia Argelia desde los primeros días de la revuelta en el país vecino y que han sido "instalados en un lugar reservado especialmente para ellos".
Por otra parte, el primer ministro argelino, Ahmed Uyahia, ha ordenado enviar a las regiones fronterizas del país alimentos, equipos y material médico para atender una posible llegada masiva de refugiados desde Libia hacia Argelia.
Según los datos oficiales difundidos hasta el momento más de 660 personas procedentes de Libia han llegado los últimos días al puesto fronterizo de Dedbeb, en la provincia de Illizi, la más meridional de las dos.
La agencia oficial argelina APS informó de que se trata de 150 argelinos, 340 egipcios, 14 alemanes, 63 franceses, 32 mauritanos, 62 libios y cinco británicos.