En este sentido, este precepto viene regulado en el Reglamento de Armas, en concordancia con la Ley 1/92 de Protección Contra la Seguridad Ciudadana, en la que se establece la prohibición de portar armas blancas en la vía pública u objetos que sean peligrosos que, sin tener la consideración de armas, incluso tratándose de herramientas, en unas circunstancias concretas, puedan ser susceptibles de ser utilizadas como armas, poniendo así en peligro la integridad física de otras personas.
Dentro de la relación de armas intervenidas por los agentes se reseñan la existencia de navajas, machetes, bates de béisbol, cúter, destornilladores, martillos y pistolas simuladas, entre otras.
Desde la Jefatura de la Policía Local indican que “las sanciones por este motivo de circunstancias pueden ascender a una cuantía de hasta un total de 300 euros y que los registros y controles en este mismo sentido se van a mantener con la misma intensidad, con el objetivo de detectar estas infracciones, así como minimizar en la medida de lo posible los riesgos y las consecuencias que se pudieran desprender de la tenencia de este tipo de armas prohibidas en la vía pública”.
