Ayer se cumplió un año de la muerte del jienense José González García, el primer secretario general de la Universidad de Jaén (UJA), que compatibilizó sus responsabilidades como licenciado en Derecho y catedrático de Derecho Civil, con una labor “encomiable” en pro del desarrollo de la institución, a la que prestó su conocimiento y bondades profesionales y humanas.
El acto de homenaje, organizado conjuntamente por el Ayuntamiento, pues el alcalde, José Enrique Fdez. de Moya fue su alumno; y la Universidad, contó con la presencia de numerosos familiares, amigos y compañeros.
Ante la puerta de la Universidad, su mujer, la pediatra Carmen Espín, descubrió el monolito con el que se reconoció a José González García y con el que siempre se recordará su trabajo. Todo ello después de que el cronista oficial de la ciudad, Vicente Oya, leyera una semblanza sobre José González; que su compañero, el catedrático Enrique Quiñarero lo recordara, y que su hija Ana emocionara a los presentes.
El monolito, de hierro y piedra, representa la fortaleza y solidez humana y profesional del desaparecido.
