El coordinador federal de IU, Cayo Lara, ha acusado al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, de "extralimitarse" en sus funciones y "hacer el ridículo" al decidir instar al propietario del Palacio de Moratalla (Córdoba) a denunciar la ocupación llevada a cabo por el diputado autonómico de IU, Juan Manuel Sánchez Gordillo, y miembros del SAT.
"Es inédito en la democracia española que un ministro llame al propietario de un bien, directamente, para presionarle para que presente una denuncia a gente que ha ido a ocuparla pacíficamente. Esas no son sus funciones, se ha extralimitado y ha hecho el ridículo de una manera estrepitosa", ha sentenciado en rueda de prensa en la sede de IU.
Asimismo, ha instado al ministro del Interior a pedirle con la misma urgencia al Ministerio de Justicia y a la Fiscalía que persigan a los grandes defraudadores fiscales, del mismo modo que lo hizo con los miembros del sindicato regional que asaltaron varios supermercados en julio.
"La misma prisa podía haber tenido, si hablamos de equidad, para haber dado las mismas instrucciones al Ministerio de Justicia para buscar donde están los delincuentes que defraudan millones a la Hacienda Pública", ha señalado, para criticar que entonces Fernández Díaz se pasó "tres pueblos".
ROBIN HOOD: PUBLICIDAD POSITIVA
Por otra parte, Lara ha negado que las acciones que está protagonizando el SAT con Gordillo al frente estén perjudicando la imagen de España en el exterior, sino precisamente lo contrario. Según el líder de IU, el hecho de que los medios extranjeros estén comparando al alcalde de Marinaleda con Robin Hood significa que "ha hecho una publicidad importante desde el punto de vista positivo".
"La marca española se deteriora mucho más con el número de parados creciente y cuando le quitan la asistencia sanitaria a los inmigrantes. Eso sí debilita mucho la marca de un país y que tengamos al ministro en una corrida de toros", ha denunciado, para añadir que "no cabe duda" de que el Gobierno, con su "política de recortes", no está ayudando "en el sentido positivo" sino que está "debilitando" la marca España.
