Beñat es mucho más que un jugador para el Betis y Pepe Mel lo sabe. La recomposición del equipo una vez conocida la ausencia por sanción del centrocampista vasco se ha convertido en la principal preocupación del técnico verdiblanco en todas y cada una de las sesiones de entrenamiento durante el obligado parón debido a los diferentes compromisos de carácter internacional con vistas al Mundial de Brasil en 2014.
Las probaturas que ha llevado a cabo el técnico madrileño apuntan a un trivote que estaría formado por Cañas, Rubén Pérez y Salva Sevilla. Esta última incorporación; sería la gran novedad en el cuadro bético, pues el almeriense no ha disputado ni un sólo minuto en lo que llevamos de campeonato.
Teniendo en cuenta esta variante de nombres, la duda fundamental reside en la disposición en cuanto al sistema que emplearía en el terreno de juego con un rival como Osasuna ligado siempre al contacto físico como arma característica.
Las opciones de Mel parten de o bien salir con un 4-3-3 cuyo rendimiento no ha sido fiable o seguir apostando por un 4-4-2 o 4-2-3-1 con bandas, sistema que sí le ha reportado mejores resultados a día de hoy. La respuesta, el próximo domingo en Pamplona.