El Ayuntamiento de Huelva ha redoblado esfuerzos en las últimas 48 horas para mejorar el lamentable estado del parque móvil de la Policía Local, después de que la imagen de los agentes de patrulla en un autobús de línea recorriera la geografía española.
Sin embargo, lo que no se ha hecho en dos meses, no se puede lograr en dos días, y por ello, a pesar del arreglo de varios vehículos -tanto coches como motocicletas-, el saldo sigue siendo negativo en el parque móvil, con más vehículos estropeados que disponibles.
Según ha podido saber Viva Huelva, a primera hora de este jueves, de los 18 coches con que cuenta la Comisaría de la Policía Local para asignar a los agentes, sólo estaban disponibles siete, es decir, que pese a las declaraciones del Ayuntamiento de que el problema ya se había solucionado, 11 de los 18 vehículos estaban fuera de circulación por distintas averías, ocho de los 15 que posee la Policía Local por contrato de renting -finalizó en marzo de 2012 pero se ha tenido que prorrogar por la ausencia de presentaciones al nuevo concurso de adjudicación-, más tres antiguos: un coche con distintivo policial pero de 1998, una furgoneta que normalmente se utiliza para desplazar a los agentes de un sitio a otro, y un todoterreno.
A media mañana los agentes pudieron contar con un vehículo de renting más, que tras pasar por el taller, volvió a la circulación.
Motocicletas
Peor es el caso de las motocicletas, ya que de las 24 disponibles, 17 estaban averiadas, lo que provocó que cuatro agentes que en principio iban a cubrir el turno de patrulla en moto, tuvieran que ser reubicados en la patrulla a pie por las calles del centro.
También en este caso, al menos tres motocicletas habían sido enviadas al taller para su arreglo.
El mal estado del parque móvil de la Policía Local onubense ha saltado a todos los medios esta semana, aunque la situación no es reciente, ya que Viva Huelva dio cuenta de ello en el mes de noviembre. Esto ha hecho que el Ayuntamiento se ponga manos a la obra para solucionar el problema, aunque eso no le ha librado de las críticas de la oposición y de algunos sindicatos.