El Santuario-Camarín es desde ayer el lugar de culto más visitado por los jienenses, que fieles a una de las tradiciones religiosas más arraigada en la capital, acudieron al besapie de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
Lo hicieron desde primera hora de la mañana, ya que el templo abrió sus puertas para el culto a las nueve de la mañana y hasta la una de la tarde, continuando de cinco a ocho. Es el horario que mantendrá hasta el próximo jueves.
Vestido con su túnica morada y rodeado de ramos florales frutos de las ofrendas de los jienenses, la imagen está custodiada por cuatro personas, dos de ellas camareras del Cristo, que se encargan de pasar por la túnica las prendas personales de los fieles y de organizar el tránsito de fieles durante el besapie.
El olor a incienso y el recogimiento del Santuario, invita estos días a la oración y las plegarias de centenares de ciudadanos que no pierden la sana y religiosa costumbre de postrarse ante Nuestro Padre Jesús Nazareno.
A pesar de las malas condiciones climatológicas de la jornada de ayer, el tránsito de cofrades no cesó durante el horario establecido, y así será hasta el 7 de marzo, pues son numerosos los fieles llegados desde diferentes puntos de la provincia para estar ante la venerada imagen.
Es uno de los momentos más esperados de la Cuaresma jienense, con el que se adelanta unos días la cercanía de los ciudadanos a Nuestro Padre Jesús, haciendo más corta la esperada Madrugada de la Semana Santa de la capital.
