La Audiencia de Málaga ha confirmado la sentencia dictada por un juzgado de instrucción de la localidad malagueña de Vélez-Málaga en la que se condenó a un hombre al pago de una multa de 200 euros a causa de que uno de sus perros, que estaba suelto como los otros por el edificio, persiguió a un niño por las escaleras y lo mordió.
Según consta en la resolución de la Audiencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el juzgado declaró probado que el denunciado es propietario de tres perros que "habitualmente deja sueltos en el pasillo común del edificio en el que reside" tanto él como la madre del niño agredido.
Además, en la sentencia se indica que estos canes "habitualmente" también ladran "en actitud agresiva" cuando alguien pasa por su lado y que el 8 de junio de 2011, cuando el niño volvía del colegio y subía las escaleras "fue perseguido y mordido por uno de los perros del denunciado, que se encontraba suelto".
Como consecuencia de estos hechos, el menor sufrió lesiones que precisaron un única asistencia médica para su curación y que tardaron en sanar completamente 14 días. Por estos hechos, el juzgado condenó al dueño de los perros a 50 días de multa, a cuatro euros por día, por una falta; y a indemnizar al menor con 416 euros.
Frente a esta resolución, la defensa del hombre presentó un recurso, que ahora ha sido desestimado por la Sala al entender que el denunciado "no cuida del riesgo que producen" sus perros, ya que "aún cuando por raza y caracteres no sean per se feroces o dañinos, la agrupación de los tres y sueltos sin dan esos caracteres".
Así, el Tribunal coincide con el juzgado en que el hombre omite "el debido control sobre los mismos" hasta el punto de que llegaron a morder a un menor, sin que conste que éste hiciera acto alguno para dar origen al ataque; y apunta que el denunciado no acudió al juicio de forma voluntaria.
