La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Córdoba ha condenado a un padre a más de tres años de prisión por intentar abusar sexualmente de una de sus hijas menores de edad, con 16 años, y pegar a otra de ellas, con 17 años, en la localidad cordobesa de Fuente Palmera.
Según recoge la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el hombre ha sido condenado a dos años y seis meses de cárcel por la supuesta comisión del delito de agresión sexual, en grado de tentativa, sobre su hija de 16 años, a la que deberá indemnizar con 3.000 euros, además de la prohibición de acercarse a menos de 300 metros y comunicarse con ella durante cuatro años y seis meses.
Por otra parte, el fallo impone al hombre nueve meses de prisión por un delito de lesiones en el ámbito familiar sobre su hija de 17 años, a la que indemnizará con 300 euros y no podrá acercarse o comunicarse con ella durante dos años y nueve meses.
En concreto, la resolución judicial declara probado que el procesado, con antecedentes penales no computables, convivía desde al menos el año 2008, en Fuente Palmera, con sus cuatro hijos --dos varones y dos mujeres--, cuando el día 23 de febrero de 2011, sobre las 18,00 horas, llegó a su domicilio, tras haber ingerido bebidas alcohólicas.
En ese instante, según la sentencia, se dirigió directamente a la habitación de su hija de 17 años, que se encontraba haciendo los deberes, y "sin motivo alguno tras cogerla de los pelos, comenzó a golpearla por todo el cuerpo, arrastrándola a continuación al salón, donde se encontraban el resto de los hermanos donde nuevamente le dio varios puñetazos en la nariz". Como consecuencia de tal agresión, la menor sufrió policontusiones, hematoma en ambas mejillas, traumatismo en cuero cabelludo y crisis de ansiedad.
Posteriormente, el juez relata que se llevó "por la fuerza" a su hija de 16 años hasta su habitación, "donde con evidente animo libidinoso, tras arrojarla a la cama, le dijo que abriese las piernas para tocarle sus partes íntimas, sin conseguir su propósito por la resistencia de la menor, y porque acudieron al domicilio personas que habían sido alertadas" por la menor, quien "aprovechando un descuido" salió para "buscar ayuda".
Cabe destacar que el 24 de febrero de 2011 la Consejería de Igualdad y Bienestar Social de la Junta acordó iniciar procedimiento de desamparo respecto de los cuatro menores, que se encuentran ingresados en un centro de protección; mientras que un día después el Juzgado de Instrucción número 1 de Posadas adoptó como medida cautelar la prohibición al procesado de comunicarse y aproximarse a sus cuatro hijos.