La banda estaba dividida en tres grupos, que llevaban a cabo su actividad en las provincias de Alicante, Murcia, Valencia, Albacete, Castellón y las Islas Canarias, según informa la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil.
El primero de los grupos, núcleo de la organización, se especializaba en robos en interior de viviendas y posterior venta de los artículos robados en España a receptores habituales, o enviándolos al extranjero.