El sindicato CSIF ha informado de la agresión a tres funcionarias del Centro Penitenciario de Albolote (Granada) por parte de una interna clasificada en primer grado de tratamiento, mientras se procedía a su cacheo en el departamento de aislamiento.
Según informa el sindicato en un comunicado, los hechos ocurrieron en la tarde de este martes, cuando la interna, de iniciales N.C.R. y que acumula en su expediente numerosas agresiones a funcionarias, "de forma inesperada", entró en un estado de agresividad escupiendo y agrediendo a las tres trabajadoras de la prisión, llegando a desgarrar los botones de la camisa de una de ellas.
Como consecuencia de lo sucedido tuvieron que acudir a los servicios médicos del Centro para ser atendidas de las leves lesiones.
Se trata de una situación que se repite en el centro, según CSIF, "debido en gran medida por la mala gestión en materia de distribución de internos que lleva a cabo la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias".
El sindicato ha explicado que en estos momentos la prisión de Albolote es la única de Andalucía que tiene internas en primer grado y en todo el territorio nacional solamente hay tres centros que albergan internas clasificadas en primer grado (las internas más peligrosas de España), Brieva (Ávila), Picassent (Valencia) y el de Albolote, "generando graves incidentes debido a la gran concentración de internas problemáticas".
CSIF ha denunciado por ello la "nefasta gestión" llevada a cabo por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias "al querer solucionar el problema rotando las internas entre estos tres centros penitenciarios, cuando en realidad, si hubiese intención de paliar el problema, se debería distribuir este tipo de internas entre todos los centros del Estado que albergan mujeres".
"También queremos denunciar desde este sindicato la falta de psiquiátricos penitenciarios donde ubicar aquellos internos o internas con problemas mentales, en la actualidad, con carácter general, los internos con dichos problemas psíquicos, se encuentran mezclados con el resto de reclusos o en departamentos donde no reciben la atención necesaria por falta de personal especializado en enfermedades mentales, situación que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ignora pese a las denuncias y recomendaciones realizadas por este sindicato", ha concluido.
