Esta banda, que también está acusada de distribuir sustancias anabolizantes en gimnasios, introducía la droga en Tenerife por medio de "correos" humanos que viajaban a la isla desde Brasil con múltiples escalas, se indica en un comunicado policial.
En cuanto a la droga que al parecer robaban a otros traficantes, la Policía Nacional señala que las mujeres que formaban parte de la banda utilizaban su atractivo físico para seducir y conseguir que otros vendedores de estupefacientes les llevasen a sus domicilios.
Una vez en los domicilios de los traficantes de drogas las mujeres avisaban a los miembros varones del grupo para que asaltaran las viviendas, y mediante palizas y amenazas conseguían las sustancias estupefacientes.
En otras ocasiones, agrega la Policía Nacional, los miembros de la banda ahora desarticulada empleaban la fuerza física para secuestrar a otros distribuidores de estupefacientes y exigir droga a cambio de su liberación, ya que la mayoría de los componentes masculinos de la banda eran de fuerte complexión.
Las investigaciones se iniciaron a mediados del pasado mes de julio, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia en Tenerife de una organización dedicada al tráfico de drogas.