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El Puerto

El Puerto de ayer y de siempre

2014 ha sido testigo de cambios sustanciales en la vida social y política, ante un nuevo año que se presume activo y decisivo.

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El año termina y con él, el curso anual llega a su fin. El balance encuentra lugar a lo más importante que ha acogido a la ciudad a lo largo de los 365 días. Doce meses que han valido para valorar, interpretar y enjuiciar todo lo referente al día a día en clave portuense.

De todas cuantas noticias han marcado el sino, ha sido el cambio constante que ha esgrimido la política portuense en su afán de posicionamiento y de cara a un ejercicio decisivo. El año arrancó con fuerza, a modo de presagio de los cambios que éste iba a acoger y como paso previo a lo que se espera tomar el siguiente que se avecina.

La cuesta de enero comenzó con la dimisión del alcalde Enrique Moresco. Una renuncia telegrafiada fechas atrás y que encontró la oficialidad el 19 de enero. Los aires nuevos y los cambios encontraron el relevo un año y medio antes de las elecciones de mayo de 2015.

Tiempo más que suficiente para dar un vuelco, de ofrecer un cambio en la apuesta, en las maneras y en las intenciones de reconducir unas políticas más cercanas y realistas a la ciudadanía.

“Después de tantos años –23 concretamente– es lógico que se plantee el futuro y mi convencimiento de que nadie debe eternizarse en el cargo me han llevado a no querer repetir una tercera legislatura y no volver a presentarme como candidato. Decisión que comuniqué a los órganos de dirección de mi partido que viene tiempo pidiéndome que me dedique a órganos públicos de mi partido y creo que ha llegado la hora de afrontar estos nuevos retos”, puntualizaba Enrique Moresco en su despedida.

Flanqueado a su izquierda por Antonio Sanz, presidente Provincial del PP, y con su sucesor, Alfonso Candón, a su derecha, ponía punto y final a su etapa como primer edil. La oposición sostenía una lectura bien diferente. “Moresco no se va, le han echado los portuenses”, apuntaba Izquierda Unida. Las diferencias con ésta y la acritud con la que se avivaba cada Pleno, sirvieron en su despedida para recordar su gestión de los últimos siete años.

Pacto pactado

El adiós de Moresco y con ella la entrada en escena de Candón, el nuevo escenario dibujado con la marcha de Antonio Jesús Ruiz y la irrupción como alcaldable de Carlos Coronado, los socios de Gobierno han visto como sus primeros espadas giraban con sus renovaciones la conformidad de un pacto asentado.

Más allá de personalismos y de políticos, la gobernabilidad -palabra tan indefinida y que abarca todo cuanto sea necesario para que ésta se eternice en el tiempo- ha demostrado no tener, salvo sorpresa, fecha de caducidad antes de dilucidar al nuevo regidor de la ciudad.

La legislatura entra en su recta final. A cinco meses para su terminación, el pacto de gobernabilidad -ése que por una u otra razón, con más intenciones ocultas que motivos reales, han dado por acabado en infinidad de momentos- por segunda legislatura, y van para ocho años, sigue vigente. Y así lo estará. Según apuntan unos y otros.

Sin barcos y sin ventas

El traslado del muelle pesquero a la margen izquierda ha encontrado con el paso de las décadas una realidad bien diferente de la que en sus inicios se pretendió ofrecer. Con el traslado de los barcos a la lonja pesquera, por un lado, la zona turística quedaba separada de la comercial.

Un revulsivo para unos y para otros, según dijeron en su momento. La margen derecha (la más cercana al centro de la población) pasaba a manos municipales para su expansión y control. La izquierda (tal y como se le ha conocido por “la otra banda”), para Autoridad Portuaria.

2014 termina con la noticia de que Asoven (Asociación de Vendedores de Pescado) se marcha de El Puerto. Se va a Jerez. Sí, a Mercajerez. Algo más de una veintena de empresas abandonan su actividad al no conseguir acuerdo alguno en las rebajas de las tasas.

El Puerto dice de esta manera con un nuevo gesto a interpretar, adiós al mar. Otro símbolo identitario de la ciudad que decide desligarse. Flota pesquera, Cofradía de Pescadores, Vaporcito y ahora Asoven. Suma y sigue.

Empresas ¿municipales?

Otra de las cuestiones que van a quedar marcadas y que van a servir para encaminar el imprevisible final de las empresas municipales. 2014 va a significar el primero de los innumerables cambios que van a sufrir éstas de aquí a un tiempo.

Toca reinventarse y adaptarse a las nuevas demandas y encuadres sociales. Los datos positivos fueron la aprobación después de 16 años de los Presupuestos antes de la finalización del año y por primera vez en el siglo XXI.

La entrega de pisos de José Antonio ha sido, al fin, otra realidad. En horas será historia y 2015 entrará con la sensación de volver a escribir otras nuevas historias.

Renovaciones políticas el puerto

Algo está cambiando en la percepción de hacer política. Bien por los tiempos que corren o por convicción, lo cierto es que los movimientos se suceden. Eso es más que sintomático y evidente y viene produciéndose desde meses atrás. Resulta notorio y palpable.

Si a nivel nacional los movimientos se van definiendo al son de regenerar y realizar un profundo cambio en las cuestiones más profundas y más determinantes de las últimas décadas, a nivel local, El Puerto, no podía ser una excepción y también se ha subido al carro del cambio.

En la segunda década del siglo XXI, las próximas elecciones se prevén ser las más indefinidas de concretar a varios meses para que se celebren. Encontrar a día de hoy, más allá de encuestas cocinadas, el panorama en la definición de dar con los 25 concejales que deban tomar posesión la próxima primavera, es motivo más que complejo y de dudosa credibilidad el aventurar. Son momentos de cambios y de posicionamientos de cara a primavera.

De mover piezas y de calibrar las repercusiones que cualquier problema pueda llegar a tener. En política, donde los tiempos poseen unos relojes bien distintos a los mortales, nada se deja al azar. Nada.

Todo tiene un plan y todo tiene una hoja de ruta predefinida de antemano. Los gestos de acercamiento con una ciudadanía cada vez más alejada -con razón y sin ella- de todo a lo que huela a política, ha provocado estrategias en su afán de provocar encuentros y verosimilitud en sus actuaciones.

Por vez primera tanto Partido Andalucista como Izquierda Unida se abren a las nuevas tendencias y celebran unas primarias para dilucidar a su representante. Bien es cierto, y significativamente, las dos formaciones lo hicieron con un solo candidato. El resto de formaciones han contando con la certificación y posterior aprobación de las direcciones provinciales.

Asuntos pendientes

El Centro de Salud de la Zona Norte

Un nuevo episodio que sumar a la larga lista de excusas llegadas desde San Telmo. De nuevo la oposición de la Junta de Andalucía en no destinar una partida para la construcción del centro médico. La penúltima excusa ha sido la falta de liquidez.

La A-491 que nunca se acaba

Una infraestructura que se incluía en 2003 y que continúa sin tener visos de acabarse. De los 7 millones de euros previstos para su conclusión, la Junta de Andalucía ha presupuestado una partida de solo 50.000 euros para su finalización.

13.000 portuenses viviendo un drama

A pesar de que las cifras a principio de año alentaron y comenzaron a descender, a la conclusión del verano, la realidad ha sido distinta en su final. Además, la ciudad perdió a 442 personas en el censo, pasando ahora a tener 88.700.

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