El Granada no se despierta del sueño de poder quedarse en primera división tras golear en Anoeta (0-3) a una Real muy floja y decepcionante que no dio una a derechas en la segunda parte.
La Real exhibió un juego alegre en los primeros minutos, en los que De la Bella y Carlos Vela pudieron abrir el marcador, aunque luego su fútbol se difuminó y estuvo durante mucho tiempo a merced de los andaluces.
Las tuvo también el Granada en este período en el que comenzó a estirarse según se asentaba en el césped de Anoeta y en el minuto 20 una gran jugada de Lass, con recorte seco al lateral Carlos Martínez, estuvo a punto de traducirse en el primer gol para los andaluces.
Lass siguió llevando peligro por su banda durante todo el primer tiempo y sus botas generaron las dos acciones de gol más peligrosas para la Real, que se llevó sendos sustos en remates de Rochina y Márquez en jugadas iniciadas por el guineano.
Chory Castro tuvo la mejor para la Real en un derechazo desde fuera del área, pero por ocasiones debió de ser el Granada el que se fuera con ventaja al descanso.
El Granada se echó atrás en la segunda parte y los donostiarras tuvieron algunos acercamientos en el que el peligro sólo se llegó a intuir, salvo en el remate a la cruceta de Carlos Martínez en el que se reflejó en su máxima expresión.
Los de Sandoval, sin embargo, no habían dicho su último palabra y espoleado por los cambios marcaría el primer gol en el minuto 74, tras una pésima gestión defensiva realista que permitió a El Arabi lucirse.
La Real se descompuso y el público se enfadó cuando Ibañez hizo el segundo, al aprovechar un nuevo error defensivo de la Real y beneficiarse del desvío a gol de un defensa guipuzcoano que sorprendió a Zubikarai.
El conjunto andaluz remataría la faena en el tramo final del partido, después del enésimo fallo en defensa de la Real, que no desaprovecharía Rochina para marcar desde 30 metros observando a Zubikarai adelantado.
