La portavoz del PP vasco, Laura Garrido (PP), ha rechazado que existan "presiones de ningún tipo" de los populares al PSE-EE para que no entre a formar parte del Gobierno del PNV en Vitoria y ha pedido a los socialistas que "deshojen la margarita" ya "por responsabilidad". Además, cree que la situación del ejecutivo del jeltzale Gorka Urtaran es "ingobernable" y va a estar "a expensas totalmente de las exigencias de EH Bildu".
En declaraciones realizadas en el debate de 'El Parlamento de la Ondas' de Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, Garrido ha señalado que Urtaran deberá explicar cómo va a gobernar con los cinco concejales que tiene de 27 ediles que existen en la capital alavesa, lo que le sitúa "muy lejos de cualquier mayoría".
"Hemos visto cómo se han repartido los distintos concejales las áreas de gobierno y se han tenido que conformar tres áreas con once departamentos, y nos da la sensación de que va a ser una situación muy ingobernable, dada la absoluta minoría del PNV, por no recordar el episodio esperpéntico de cómo han accedido el PNV y Urtaran al Ayuntamiento de Vitoria", ha destacado.
Por ello, ha subrayado que, "a día de hoy, la gobernabilidad del Ayuntamiento de Vitoria está sin garantizar", por lo que el nuevo alcalde deberá decir cómo lo va a gobernar, mientras que el PSE-EE, "también en aras a la responsabilidad" deberá aclarar qué va a hacer.
"Todos sabemos que, el PSE-EE en el último momento se descolgó de un pacto entre el PNV y Bildu porque, al final, el señor Urtaran ha sido alcalde de Vitoria con los votos de EH Bildu", ha indicado.
En esta línea, ha manifestado que los socialistas "se descolgaron a raíz del episodio de Andoain", donde un concejal independiente del PNV votó en blanco en lugar de apoyar a la candidata del PSE-EE, con lo que propició que EH Bildu se hiciera con la Alcaldía. "El PSE-EE deberá deshojar la margarita de si entra o no entra por pura responsabilidad", ha apuntado.
Laura Garrido ha considerado que Gorka Urtaran "va a estar a expensas totalmente de las exigencias de EH Bildu en el Ayuntamiento de Vitoria y, así, no se va a dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos de Vitoria". "Y, desde luego, va a ser muy complicado gobernarlo", ha añadido.
PACTO PNV-PSE
Además, se ha referido al pacto global de estabilidad institucional suscrito entre PNV y PSE-EE tras los comicios del pasado 24 de mayo, para señalar que "ya era conocido en las elecciones, aunque se haya tratado de ocultar".
"Parece que, en ese momento, les daba un poco de vergüenza explicar a los ciudadanos vascos que, después de las elecciones iban a pactar entre los dos partidos y a repartirse el poder institucional allí donde pudiera dar la suma aritmética", ha destacado.
A su juicio, "al final, se asiste a un reparto de carteras donde es posible" y ha mostrado su impresión de que el pacto "está más movido por los intereses partidistas de estos dos partidos, que, cuando llega la hora de ponerse de acuerdo en temas concretos, se ven las diferencias", en alusión a la aprobación de la Ley de Vivienda. "Han defendido posiciones radicalmente opuestas", ha manifestado.