La huelga de basura de Limasa ha vuelto a poner de acuerdo a los grupos en la oposición, Partido Socialista, Málaga Ahora y Málaga para la Gente, que exigen al equipo de Gobierno popular una solución tras cuatro días de paro de limpieza. Apuestan por "ceder", buscar un "punto intermedio" y, sobre todo, insisten en que el presupuesto de este año "no es excusa para no desbloquear el conflicto laboral" que mantiene en vilo a la ciudad. Además, culpan de la situación al regidor popular, Francisco de la Torre, a quien recriminan no haber negociado con más antelación para evitar llegar a la huelga.
Quien se descuelga del grupo, en esta ocasión, es el líder naranja, Juan Cassá. El portavoz de Ciudadanos insiste en que frente al debate sobre el modelo futuro del servicio de limpieza, su formación apuesta por "cambios en la gestión del día a día". Ciudadanos eso sí, se muestra partidario de modificar el presupuesto para abonar la paga de productividad a la plantilla, cuantificada para este año en algo más de un millón de euros.Incluso asegura que hay partidas de las cuentas "donde rascar" para conseguir dar respuesta a la reivindicación que pondría fin a la huelga.