El Ayuntamiento de Barcelona ha descartado la compra directa o avalar una compra colectiva del 'banco expropiado' de Gràcia, por el precio "desorbitado" del inmueble, que supera el medio millón de euros.
El concejal del distrito de Gràcia, Eloi Badia, lo ha anunciado a los medios en una comparecencia para informar del desarrollo de las conversaciones para encontrar una vía de salida al conflicto, después de que la pasada semana los Mossos d'Esquadra desalojaran el inmueble.
"Nunca hemos planteado una compra nuestra", sino "una compra a precio razonable asumible por el tejido asociativo", en que éste se "hiciera cargo del proyecto de colectivización", ha precisado el concejal de Gràcia, que ha explicado que la idea salió de las conversaciones entre el ayuntamiento y las entidades del distrito, aunque tras conocer la cuantía se ha descartado.
"La idea era que un dispositivo ciudadano se apropiase de local y eso tenia que ir asociado a un precio asequible. La realidad se ha impuesto", ha apuntado el concejal.
Badia ha señalado que la posibilidad de una permuta también está descartada porque también estaba vinculada al precio, que ha asegurado que en las conversaciones con el propietario nunca se llegó al detalle pero se superaría el medio millón de euros. "Si el precio es éste, el ayuntamiento no ha de entrar en esta operación", ha incidido.
"No seguiremos haciendo esfuerzos -para comprar el local- y los dedicaremos a otras vías", ha señalado Oriol Badia, que ha indicado que el ayuntamiento vuelve a apostar por la idea de encontrar locales alternativos donde las actividades del colectivo puedan continuar.
Según el concejal, partiendo de la aceptación de que el proyecto "pueda continuar en otro lugar" y con el nuevo escenario de "normalidad" si se constituye la mesa de trabajo con el tejido vecinal, institucional y el colectivo propuesta por el ayuntamiento "la solución estaría cerca".
El concejal ha considerado que existen posibilidades de encontrar un local alternativo donde las actividades que se llevan a cabo en el local puedan continuar y que éste es "el camino más claro y sencillo".
Esta misma mañana, la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona Laia Ortiz ha explicado que el consistorio estaba negociando con la propiedad comprar el local a un "precio razonable".
Todos los grupos de la oposición han rechazado la posibilidad de la compra.
