La hermandad de Nuestra Señora del Rosario en sus Misterios Dolorosos celebró el viernes, festividad de la Virgen del Rosario la función con la que culminaba el triduo en honor de la titular y antigua advocación isleña.
Fue una misa en la que los hermanos de la hermandad del Rosario en sus Misterios Dolorosos. Esa hermandad minoritaria y especial con hermanos comprometidos en el rezo del rosario, amplían su devoción con la solidaridad de atender al necesitado con ocasión de la festividad de la Virgen.
Resulta una hermandad sin acompañamiento musical, tan sólo el rezo del rosario es lo que suena. Es una hermandad sin flores en su parihuela, aunque sí las tiene la Virgen en sus cultos o en su altar. Resulta una hermandad distinta, que después de más de 25 años no pasa desapercibida y supone un contrapunto en la noche del Viernes Santo y Madrugada del Sábado Santo. La misma que servía para su salida procesional desde la iglesia de San José Artesano, la vieja y la nueva.
Los hermanos del Rosario, celebraron sus cultos a la Virgen del Rosario en sus Misterios Dolorosos. Una festividad muy antigua. Tan antigua que la devoción ya existía antes del comienzo de la Isla de la Real Isla de León como cabildo autónomo.
Precisamente, la imagen más antigua, es la que se conserva en la nave de la epístola, procede, según las investigaciones, de la capilla de Santa María del Castillo. Se trata de imagen de talla completa, con estofado y dorado, que presenta una destacada raja, producto del paso de los años. A ella, la más antigua, le dedica la JCC anualmente una función y una ofrenda floral, al considerarla su patrona.
Miembros de la junta rectora de la JCC participaron de la eucaristía en la iglesia Mayor, donde el altar de la Virgen del Rosario permanecía con las velas encendidas, al igual que en su fiesta permaneció encencido el altar del arcángel San Miguel. Una antigua devoción de La Isla, que no pasa desapercibida.
