El Gobierno ha desmentido tener conocimiento de que Irán proyecto construir una nueva refinería en el Campo de Gibraltar, tal y como afirmó en enero del año pasado el ex ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo.
El Ejecutivo se posiciona así, de forma oficial, en un asunto de gran interés y trascendencia para la comarca, después de una pregunta parlamentaria que habían girado al respecto los diputados de Unidos Podemos Juan Antonio Delgado y Noelia Vera.
Concretamente, en la respuesta oficial publicada ayer en el Boletín Oficial de las Cortes, se especifica que “el Gobierno, a través del el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, no tiene constancia de la presentación de ninguna solicitud para la construcción de una nueva refinería en el Campo de Gibraltar”.
El Gobierno ahonda en su respuesta en que la única vía para tener conocimiento oficial de dicho proyecto es el procedimiento ordinario, que consiste en la tramitación de una solicitud.
“La construcción, puesta en explotación o cierre de las instalaciones de refino estará sometida al régimen de autorización administrativa previa en los términos establecidos en la presente Ley y en sus disposiciones de desarrollo”, señalan.
En ese sentido, remarcan que para la obtención de tales autorizaciones, los solicitantes deberán acreditar los siguientes extremos: las condiciones técnicas y de seguridad de las instalaciones propuestas; el adecuado cumplimiento de las condiciones de protección del medio ambiente; y la adecuación del emplazamiento de la instalación al régimen de ordenación del territorio.
“Las autorizaciones a que se refiere el presente artículo tendrán carácter reglado y serán otorgadas por el Ministerio de Industria y Energía, de acuerdo con los principios de objetividad, transparencia y no discriminación”, concluye el Gobierno en su respuesta.
Con la información proporcionada por el Gobierno, se descarta que el anuncio que efectuó el ministro de Exteriores hace un año tenga que ver con un proyecto en firme que haya sido notificado de forma oficial desde Irán.
El anuncio fue rechazado de forma unánime por los grupos ecologistas Greenpeace, WWF, Verdemar-Ecologistas en Acción, SEO/Birdlife y Mesa de la Ría de Huelva, que calificaron la instalación de una nueva refinería en Algeciras como “un genocidio por los problemas aparejados para la salud humana”.
Acuerdo EEUU-Irán
El ex ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, realizó el anuncio en enero del año pasado en Bruselas, como uno de los beneficios del levantamiento de las sanciones a Irán por su programa nuclear.
Margallo apuntó entonces a que Irán proyectaba “establecer una nueva refinería en España, más concretamente en Algeciras”, lo cual “contribuiría a crear puestos de trabajo en el Campo de Gibraltar, que era una de mis preocupaciones”, incidiendo en el elevado desempleo de la comarca.
García-Margallo avanzó incluso detalles, señalando que las empresas “ya están hablando” y que “hemos estado a punto de conseguirlo en el pasado con Rosnef cuando las conversaciones con la compañía rusa se interrumpieron como consecuencia de las sanciones. Pero la inversión iraní puede ocupar el vacío dejando y crear puestos de trabajo”, dijo.