La Archidiócesis de Sevilla ha informado este lunes de que esta misma mañana han comenzado los trabajos de la tercera y última fase de la restauración de la iglesia gótico mudéjar de Santa Catalina, declarada Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1985 y cerrada al culto desde 2004 como consecuencia de sus deficiencias arquitectónicas. Dicha fase del proyecto integral de restauración, como se recordará, comprende la rehabilitación interior del templo y la excavación arqueológica.
Las actuaciones, según la Archidiócesis, serán realizadas por la empresa Trycsa bajo la dirección del arquitecto Francisco Jurado, encargado de las labores y fases previas del proyecto, y tendrán una duración aproximada de un año.
De forma inmediata, así, se van a reanudar los trabajos arqueológicos en el interior del templo. Una vez concluidos los mismos, se procederá al forjado del edificio, la instalación de solería y demás instalaciones previstas en esta fase de la restauración. A lo largo de la semana, en cualquier caso, debe quedar instalado el cajón de obra necesario para el desarrollo normal de los trabajos.
Uno de los aspectos más llamativos de esta actuación final será la construcción de una cámara bufa en el perímetro de la iglesia, para preservar el templo de los efectos de las humedades. Esta cámara perimetral tendrá una anchura aproximada de 70 centímetros y será realizada por fases para aminorar el impacto de la obra sobre el tráfico rodado y de las personas.
