El San Fernando CD se mide este Domingo de Resurrección al Lorca Deportiva con la clara intención de sumar una victoria que le deje a las puertas de la salvación y, de esta manera, conseguir el objetivo de esta temporada que no es otro que la permanencia y que, además, haría que el cuadro azulino dejase de ser ese equipo ascensor de los últimos años que deambula entre Segunda B y Tercera en temporadas alternas.
El encuentro dará comienzo a las seis de la tarde en Bahía Sur y será dirigido por el colegiado castellano-manchego Mohamed Massat, que hasta el momento ha pitado esta campaña nueve encuentros dentro del Grupo IV de Segunda B con un bagaje de cinco victorias locales, tres empates y un triunfo visitante. Tiene una media de 5,6 cartulinas por encuentro.
Los azulinos afrontan otra nueva final y tienen la oportunidad de dar una estacada casi definitiva a otro de los rivales que pelea por eludir el descenso de categoría. Seis puntos separan en la actualidad a los isleños con respecto al cuadro lorquino, 38 de los de Pérez Herrera por 32 de los de Mario Simón, es decir, que un triunfo le permitiría abrir una brecha de nueve puntos, más el gol average, con respecto al Lorca Deportiva.
De ahí la trascendencia del encuentro para el cuadro cañaílla que, además, recupera para el choque a Gabi Ramos –indiscutible en la zaga isleña- y a Buba, que no pudieron jugar ante el Betis B por estar sancionados.
El San Fernando quiere mantener la dinámica positiva de los dos últimos encuentros, donde ha conseguido sumar la media inglesa, es decir, 4 de 6 puntos, tras su victoria en casa hace quince días con el Badajoz (2-1) y el empate in extremis con el Betis B del pasado fin de semana (2-2). Dos partidos que han servido además para vivir el resurgir de Javi Casares tras una temporada aciaga hasta ahora para el jerezano y que, lo bueno, es que ha empezado a ser decisivo en el tramo fundamental del Campeonato.
Por su parte, el Lorca Deportiva afronta el choque tras tres jornadas sin conocer la derrota, con una victoria y dos empates consecutivos, el último el pasado fin de semana en casa sin goles ante el líder Marbella.
Por lo tanto, otra final, otro partido a cara de perro del que el San Fernando pretende salir airoso y colocarse con 41 puntos, a un escalón y medio de la permanencia cuando todavía restarían por delante seis jornadas para finalizar la temporada.