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¡Vaya palo!

El Cádiz CF tenía la clasificación para la fase de ascenso en el minuto 91, pero empató el Tenerife y ahora deberá jugársela en la última jornada

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Andaluc�a Informaci�n

El cadista Abdullah.

El cadista Carrillo.

Afición cadista en el Carranza.

El cadista Álvaro García.

Joseba Etxeberría.

El cadista Jona.

El cadista Perea.

El cadista Álvaro García.

El cadista Perea.

Divertida pancarta en el Carranza.

El cadista Jona lamenta una oportunidad.

Álvaro Cervera.

Gol del cadista Perea.

El cadista Perea celebra su gol.

El cadistá Álvaro García.

  • El Cádiz CF tenía la clasificación para la fase de ascenso en el minuto 91, pero empató el Tenerife

Un gol de Malbasic en el minuto 91 dio al traste con la clasificación matemática para los play offs, que el Cádiz CF tenía en el bolsillo en ese momento. La derrota del Numancia y el resto de resultados metía a los amarillos en la fase de ascenso al dejar a los sorianos a cuatro puntos y a dos puntos tanto al Valladolid como a Osasuna, que se enfrentan en la última jornada. Pero el tanto chicharrero rompió todas las cuentas y dejó callado al Carranza.

Había que ganar, no quedaba otra. Con todos los partidos a la misma hora, el Cádiz podía certificar su participación en la fase de ascenso o complicársela de forma inimaginable. Había dicho el entrenador cadista en la previa que al menos habría que ganar uno de los dos partidos finales, así que el objetivo era claro: sumar los tres puntos.

Apostó Cervera por situar a Carrillo en la banda derecha debido a la ausencia de Salvi. Y en la punta del ataque, Jona, quedándose Romera en el banco de suplentes y Barral fuera de la lista por lesión. En la sala de máquinas, Álex Fernández y Abdullah, que entraba por el también lesionado Jon Ander Garrido.


Pero si estaban obligados a ganar los locales, más aún lo estaban los tinerfeños, que incluso haciéndolo dependían de otros resultados, pero sin tres puntos no tendrían nada que hacer. Y, claro, esas obligaciones parecían atenazar a ambos equipos, bien plantados en defensa, pero sin apenas presencia en ataque durante el primer tramo.

A base de corners lo intentaba el Tenerife, que llegó a botar hasta tres seguidos pasados los veinte minutos. La tuvo el Cádiz a la media hora, pero el disparo de Perea se perdió cruzado a la derecha de la portería. Por poco, pero se fue la primera opción.

Más clara fue la oportunidad de Jona. Un pase de Álex lo controló el delantero dándose la vuelta sobre su marcador, pero su disparo terminó con una buena intervención del portero chicharrero.

Pese a ese mayor empuje local se llegó sin goles al tiempo de descanso de una jornada que solo contabilizaba cinco tantos en los once partidos que se estaban disputando.

Sin cambios se reanudó el encuentro. El Cádiz, con el triunfo y los resultados que se estaban dando en ese momento, sería matemáticamente equipo de play off. Pero tenía que ganar y no lo estaba consiguiendo todavía.

Con demasiada facilidad se plantó en el área local un Tenerife que parecía jugar a medio gas viendo que los resultados  tiraban por tierra sus mínimas opciones.

Ante esa tranquilidad chicharrera, los nervios eran de los locales. Además, en el resto de partidos se iban encadenando goles de rivales directos.

Pasada la hora de partido llegó el estadillo en el Carranza. Perea disparó desde la frontal del área y el balón se coló pegado al poste derecho de Dani Hernández. La explosión de júbilo era enorme viendo además el resto de resultados, que dejaban al Numancia como único peligro para la clasificación. Lo más difícil estaba conseguido y el Tenerife no estaba por la labor de apretar demasiado.

De vacaciones prácticamente, los visitantes adelantaban líneas más porque el Cádiz se echaba atrás que por su propio empuje. Romera entró por Jona para refrescar la punta del ataque amarillo mientras la afición local no paraba de consultar el resto de marcadores. Y no era moco de pavo esa consulta porque en todos los partidos se jugaba algo y, a falta de diez minutos, el Cádiz tenía la clasificación en el bolsillo. Con el Numancia perdiendo y también el Valladolid no importaba la victoria de Osasuna porque rojillos y pucelanos deben medirse en la última jornada y, estando a dos puntos del Cádiz es imposible que ambos lo alcancen. Eso sí, en el Carranza ya se miraba también la hora.

Pero de la alegría se pasó a la incredulidad y el enfado cuando Malbasic batió a Cifuentes con un disparo pegado a la derecha. Era ya el tiempo añadido y se esfumaban todas las cuentas del Cádiz, obligado a jugársela en Granada. Aún tuvieron tiempo los amarillos para marcar con una oportunidad más que clara. Entre Romera, Aitor y Álvaro se plantaron en una contra ante Dani Hernández, pero no acertaron a disparar y con esa jugada fallida murió el partido.

- Ficha técnica:
1 - Cádiz:
Cifuentes; Correa, Marcos Mauro, Servando, Oliván; Abdullah, Álex Fernández, Perea (Eugeni, m.80), Álvaro; Jona (Romera, m.71) y Carrillo (Aitor, m.59).
1 - Tenerife: Dani; Cámara (Mula, m.65), Ruiz, Aveldaño, Iñaki; Alberto (Malbasic, m.77), Milla; Villar, Acosta (Juan Carlos, m.62), Luis Pérez; y Casadesús.
Goles: 1-0, M.62: Perea; 1-1, M.91: Malbasic.
Árbitro: Moreno Aragón (Comité madrileño). Amonestó con cartulina amarilla a los visitantes Dani Hernández, Acosta y Casadesús.
Incidencias: Partido de la jornada 41 de Segunda División, disputado en el estadio Ramón de Carranza ante 16.705 espectadores. 

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