El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que empieza este lunes una visita de Estado al Reino Unido, ha manifestado su apoyo a Boris Johnson como nuevo líder conservador al afirmar que sería un "excelente" primer ministro británico.
"Creo que Boris haría un trabajo muy bueno", dijo Trump sobre el exministro de Exteriores en una entrevista que este sábado publica el tabloide británico "The Sun".
El presidente de EE.UU. manifestó su respaldo a Johnson antes de que el Partido Conservador inicie oficialmente el próximo día 10 el proceso para elegir al nuevo líder "tory" y jefe del Ejecutivo una vez que dimita Theresa May al frente del Gobierno el próximo día 7.
Para sustituir a May, en un proceso que se espera termine a mediados o finales de este julio, se han presentado más de diez diputados conservadores, entre ellos el ministro de Exteriores, Jeremy Hunt, y el de Interior, Sajid Javid.
"Conozco a los distintos aspirantes. Pero creo que Boris haría un trabajo muy bueno. Creo que sería excelente. Me gusta, siempre me ha gustado", resaltó Trump, que calificó al antiguo responsable del Foreign Office como un político "muy talentoso".
El mandatario estadounidense no quiso dar los nombres de los políticos "tories" que al parecer le han pedido su apoyo, aunque se expresó de manera favorable hacia Hunt, del que dijo: "me gusta".
Boris Johnson aparece como favorito para suceder a May en un proceso de varias votaciones entre los diputados, en las que poco a poco se irán eliminado aspirantes hasta que queden solo dos.
Los dos últimos candidatos deberán someterse entonces a la elección de los afiliados conservadores.
El pasado miércoles, una juez dispuso que Jonhson comparezca ante un tribunal por "mentir" supuestamente sobre las aportaciones del país a la Unión Europea (UE) en la campaña del referéndum de 2016.
En esa campaña, en la que ganó el "brexit", el político llegó a afirmar que este país asignaba al bloque europeo 350 millones de libras (396 millones de euros) semanales.
Johnson, antiguo alcalde de Londres, se enfrenta a una denuncia privada presentada por el activista Marcus Ball, quien le acusa de "mala conducta en un cargo público" por la citada afirmación.
Los abogados que representan a Ball solicitaron que Johnson rinda cuentas ante un tribunal, al argumentar que el político llevó a error a la ciudadanía de manera deliberada durante la campaña previa al referendo celebrado el 23 de junio en 2016.
También, según la acusación, el político británico reiteró ese mismo mensaje durante las elecciones generales de 2017.