Más de 200 animales que se encuentran en estos momentos en el refugio El Santuario La Candela, en el municipio sevillano de Puebla del Río, se quedarán sin hogar "por causas ajenas" al refugio, en el que actualmente residen más de 600 animales provenientes del maltrato, abandono y explotación. En un mes comenzarán a demoler parte de las instalaciones donde estos residen y sus responsables ya han iniciado una campaña para dar a conocer esta situación y recaudar fondos para evitar que se queden sin refugio.
Según explican desde la entidad, en 2016 el santuario La Candela llegó a la Puebla Del Rio, ubicándose en una finca de 65 hectáreas y una de 5 con múltiples instalaciones ganaderas y viviendas humanas, ambas propiedad de una misma persona con la que se llegó a un acuerdo. Los responsables del santuario, explican, "desconocían por completo la situación judicial personal de esta persona que iba a afectar de manera directa a la asociación y a las instalaciones construidas y usadas por ellos posteriormente".
En 2017, "por diferentes circunstancias comenzaron a conocer los problemas legales que rodeaban a esta persona" e iniciaron, junto a su equipo de abogados y técnicos, los trámites de legalización "de todo lo que esta persona había construido sin licencia estricta, pese a que algunas tramitaciones sí estaban hechas".
Relatan que entonces se inició "una carrera de trámites y gastos administrativos" que después de "tres años de lucha con tres administraciones diferentes no les dieron solución alguna".
"Ninguna de las tres administraciones se siente competente para la resolución del problema, dejándolas en un limbo totalmente vulnerable a las presiones personales que sufren diariamente por parte del dueño de la finca y de la persona que ha potenciado todos estos problemas con su mal hacer y su indiscriminada ocultación de datos que ha retrasado considerablemente los trámites", aseguran.
La asociación es propietaria de 65 hectáreas y "la persona que les presiona y que debe demoler para evitar su entrada en prisión es propietaria de 5 hectáreas", que se donde actualmente se encuentran las instalaciones sujetas al derribo inminente, lo que afectará directamente a más de 200 animales.
"Van a demoler en un mes muchas de las instalaciones que a día de hoy son el hogar de esos animales rescatados y necesitan de manera urgente y en tiempo récord reconstruirlas para poder reubicarles", aseguran.
Por tal motivo, desde la asociación se ha comenzado una campaña de divulgación de la situación y de recaudación de fondos para construir, en el menor tiempo posible, nuevas intalaciones para atender a los animales que se verán dorectamente afectados por esta demolición.
