La empresa Vectio ha realizado entre ayer y hoy miércoles alrededor de 1.000 encuestas a los trabajadores y usuarios de las seis sedes judiciales que hay en la ciudad con un objetivo: saber cómo se desplazan actualmente y cuál sería su opción preferida en caso de que la Ciudad de la Justicia se trasladase al complejo actualmente ocupado por la multinacional Abengoa en el Sur de la ciudad.
Además de las pertinentes preguntas sobre la edad, la ocupación y el nivel formativo, la encuesta contiene once preguntas específicas sobre movilidad. En concreto, los encuestadores han preguntado al personal y a los usuarios de las sedes judiciales del Prado, Audiencia, Noga, Viapol, Juzgados de Violencia y Menores cuánto tiempo invierten en su desplazamiento al trabajo cada día, con una horquilla que oscila entre los cero y los cinco euros; su valoración sobre las alternativas de transporte; el tiempo que emplea en llegar al puesto de trabajo y los motivos por los que no utiliza transporte público como autobús o Metro.
La pregunta clave se plantea al final: "Si se decidiera la implantación de una Ciudad de la Justicia de Sevilla en un nuevo emplazamiento, ¿cuál sería su opción preferida de desplazamiento a la misma?" Las opciones planteadas son: vehículo propio, coche propio pero compartido, autobús exrprés, cercanías o Metro. Desde la apertura del centro comercial Lagoh, a Palmas Altas hay una nueva línea rápida, la 35. En cuanto al cercanías y el Metro, ambas infraestructuras no existen aún en esta zona de expansión de la ciudad, pero han sido defendidas como prioritarias tanto por el Ayuntamiento como por la Junta de Andalucía que, hace unos meses, anunciaron su intención de plantear esta necesidad al Ministerio de Fomento. La convocatoria de unas nuevas elecciones generales para el 10-N ha vuelto a paralizar cualquier intento de sentarse a negociar.
La comisión técnica constituida el pasado mes de agosto para ejecutar el Plan de Movilidad como paso previo e indispensable para ubicar la Ciudad de la Justicia en Palmas Altas, y en la que participan las consejerías de Justicia y Fomento y el Ayuntamiento de Sevilla, aprobó adjudicar el 16 de septiembre el contrato para la realización de estudios previos y trabajo de campo sobre hábitos de transporte actuales para ir a las sedes judiciales y volumen de personas que diariamente se mueven en estos edificios.
Éste es el trabajo que está desarrollando la empresa Vectio y que, además de las encuestas, cuenta con la instalación de cámaras cenitales en las puertas de las sedes judiciales para conocer con exactitud cuántas personas entran y salen al día de los juzgados. Estas cámaras son "especiales", aclaran fuentes de la Consejería de Justicia, ya que no graban a personas sino que con un sistema de "visión artificial" detectan movimientos.
El vicepresidente de la Junta, Juan Marín, y el alcalde de la ciudad, Juan Espadas, ya despejaron la incógnita y anunciaron que la mejor y más barata de las opciones para hacer la Ciudad de la Justicia era Palmas Altas: cuatro años de plazo y algo más de 140 millones de euros. Esos eran los números. Pero el sector de la judicatura, con el que hubo una reunión antes del verano en la Audiencia Provincial, también dejó clara su línea roja: cualquier ubicación pasaba por garantizar que se podía llegar con facilidad. En resumen: garantías de un plan de movilidad. En este punto es donde se encuentran en este momento las cosas. La mesa técnica del Plan de Movilidad espera el resultado del trabajo de campo que ya ha arrancado para empezar a perfilar las alternativas con las que trabajadores y usuarios se desplazarían hasta Palmas Altas.