El Gobierno ha anunciado este martes que España denegará nuevas licencias de exportación a Turquía de material de defensa que sea "susceptible de ser utilizado en la operación en Siria", después de la ofensiva militar del Gobierno de Recep Tayyip Erdogan en el noreste del país.
En un comunicado, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha condenado la acción militar turca en Siria, que ha denunciado que está teniendo "desastrosas consecuencias humanitarias" que "se añaden al profundo y largo sufrimiento del pueblo sirio".
Además, lamenta que esta ofensiva aumenta el número "ya considerable" de refugiados y desplazados, "entorpece" la ayuda humanitaria y "pone en peligro la estabilidad y la seguridad de la región".
El Gobierno español cree que la acción militar emprendida por Turquía "hace más difícil" la consecución de la paz en Siria y, además, "da nueva vida" a la organización terrorista Daesh; todo ello poniendo en peligro "la unidad, la soberanía y la integridad territorial del Estado sirio".
Con todo ello, el Gobierno ha decidido denegar nuevas licencias de exportación de material militar que sea susceptible de ser utilizado en suelo sirio, tal y como ya habían avanzado durante los últimos días los ministros en funciones de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, y de Defensa, Margarita Robles.
EN SUELO TURCO CON LA OTAN
A juicio del Ejecutivo, Turquía debe abordar sus "legítimas preocupaciones de seguridad" a través de medios "políticos y diplomáticos" y nunca a través de acciones militares.
En este marco, el Gobierno ha recordado que los militares españoles que participan en Turquía en una misión de la OTAN con una batería antimisiles Patriot lo hacen con el objetivo de "contribuir a la paz y la estabilidad de la región".