El Coronavirus ha movido todo el calendario deportivo y ha afectado a la gran cita del deporte mundial, los Juegos Olímpicos. Este gran evento ha sido retrasado hasta el próximo verano y ha dejado a muchos deportistas sin poder luchar por la plaza olímpica. Uno de ellos ha sido Josué Brachi, que ha estado esta noche en el programa Minuto 91 para hablar de su situación.
En sus declaraciones, el atleta sevillano ha confesado cómo está viviendo el confinamiento, cómo se entrena y cómo le afecta que se haya movido todo el calendario olímpico.
En primer lugar, Josué habló sobre cómo está afrontando la cuarentena: "Es difícil verle el lado positivo a todo esto, sobre todo porque no puedo entrenar y los entrenamientos previos que había hecho se han consumido".
"No tengo barras, no tengo pesas, no tengo una tarima, es complicado para mí. Lo que hago en casa es levantar a mi novia, muchos abdominales, mucho estiramiento... Se hace lo que se puede con lo que se tiene. No tengo material. Desde el IMD me dijeron que no era posible entrenar, ni llevarme cosas a casa y eso repercute negativamente en lo que teníamos previsto", explicó el sevillano.
El calendario olímpico se ha atrasado hasta el próximo verano, algo que afecta directamente a Josué Brachi y a sus planes de entrenamiento: "Se puede mirar por el lado positivo. Tenemos un año más para prepararnos y adaptarnos. Personalmente tengo un año más para adaptarme a la nueva categoría, la de 61 kilos y también tengo otro año más para conseguir la plaza olímpica".
El gran problema de cara a los Juegos Olímpicos es que Brachi ha tenido que dejar de entrenar, pero sus rivales siguen trabajando: "Tengo amigos en otros países y siguen entrenando. Sólo los españoles no estamos entrenando. El resto de los países han hecho pequeñas concentraciones en las que pueden trabajar o se les han habilitado pabellones para entrenar".
El atleta también habló sobre cómo llevan sus vecinos que él sea un deportista de élite: "No ganamos tanto como los deportes mayoritarios. Nos da para vivir pero poco más. Yo vivo en un piso, un piso normal. Mis vecinos me aguantan y me animan. Como he dicho antes, se hace lo que se puede".
Por último, Josué Brachi confesó cuáles son sus objetivos: "Siempre me pongo las metas más altas. Hay que ser realistas y cuando esto acabe estaré al cuarenta o cincuenta por ciento. Espero llegar bien al europeo y poder clasificarme para las olimpiadas. Creo que me va a tocar trabajar de lunes a lunes cuatro veces al día", concluyó el sevillano.
