La Guardia Civil, en dos operaciones contra los daños en trenes por la realización de grafitis, ha detenido a un menor de edad y ha investigado a otro como presuntos autores de delitos de desórdenes públicos, al realizar 'palancazos'(accionar el freno de emergencia) para detener los trenes, así como de daños, por pintar grafitis en éstos.
También ha detenido a dos vecinos de Santander de 20 y 24 años como presuntos autores de daños a trenes por grafitis valorados en unos 6.000 euros.
A primeros de enero, en Quijas, se había accionado el freno de emergencia de un tren y se habían bajado dos jóvenes que realizaron grafitis en los vagones. Esta acción en el argot de los grafiteros se denomina 'palancazo'.
Como consecuencia de haber accionado el freno, el tren sufrió una avería y se generó alarma entre los viajeros, que Renfe tuvo que trasladar al destino en autobús y taxi.
En Cantabria no es habitual que los grafiteros utilicen el método del 'palancazo', lo que unido a la baja calidad de los dibujos hizo sospechar a los agentes que los autores eran muy jóvenes y se estaban iniciando.
La Guardia Civil intensificó la vigilancia en estaciones o lugares susceptibles de hacer grafitis a trenes. De esta forma, a finales de enero sorprendieron a dos menores de 17 años haciendo un grafiti en la pared de la estación de Mogro, por lo que instruyeron un informe-denuncia.
Por el tipo de grafiti que estaban realizando, sospecharon que los dos menores podían ser los autores del 'palancazo'. Además encontraron evidencias en otros dibujos o firmas estampados en mobiliario urbano, presuntamente obra de ambos.
Mientras se realizaba la investigación, Renfe informó que en diciembre se había producido otro 'palancazo' en el apeadero de Cazoña-Santander.
Los grafitis y el modus operandi apuntaban la presunta autoría de los menores sospechosos, y finalmente uno de ellos fue detenido y el otro investigado.
6.000 EUROS EN DAÑOS
En otra investigación por la denuncia de dos delitos de daños a trenes mediante grafitis, cometidos en las estaciones de Bárcena de Pie de Concha y en El Astillero el 18 de junio de 2020, los agentes sospecharon que los autores de ambos eran las mismas personas, ya que coincidían los 'tags' (firmas). Los daños fueron valorados en unos 6.000 euros
Tras las primeras indagaciones y gracias a la colaboración ciudadana se pudo saber que un joven de 20 años, vecino de Santander, era uno de los participantes, y fue detenido una semana después de los hechos.
La investigación continuó para averiguar la identidad de otro, del que se conocían rasgos físicos coincidentes con un hombre que ya había sido detenido por la Guardia Civil por hechos similares en Cantabria y Asturias.
Esta información sirvió para comparar grafitis que había realizado esta persona anteriormente con los de los trenes que se estaban investigando. Las coincidencias que se encontraron, unidas a otras pruebas, permitieron su detención en enero.
Ambas operaciones han sido realizadas por el equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Torrelavega.
En 2019, la Guardia Civil ya destapó a un grupo delictivo por realizar grafitis en más de 2.000 unidades de ferrocarriles, tanto en España (Cantabria, Asturias, Burgos, País Vasco, Valencia, Madrid, Islas Baleares), como en otros países de Europa (Italia, Alemania, Rumanía, Portugal, Holanda, Francia y Suecia).
Se estimó que el perjuicio económico superaba los seis millones de euros.