La incidencia acumulada en siete días bajó en Alemania hasta 67,3 nuevos contagios con coronavirus por cada 100.000 habitantes, frente a 68,0 ayer y 96,5 el pasado viernes, niveles que permiten avanzar en la desescalada a las puertas de un fin de semana largo de Pentecostés.
Las autoridades sanitarias notificaron 8.769 nuevos contagios en un día y 226 decesos, frente a 11.336 nuevos casos y 190 muertes hace una semana, según datos del Instituto Robert Koch (RKI) de virología actualizados la pasada madrugada.
El máximo de contagios se registró el 18 de diciembre con 33.777 nuevas infecciones en un día y el de muertos, el 14 de enero, con 1.244, mientras que la incidencia llegó a su pico el 22 de diciembre con 197,6.
El factor semanal de reproducción está en 0,82, lo que implica que cada cien infectados contagian de media a otras 82 personas.
A pesar del actual retroceso, el RKI advierte en su informe diario de que el riesgo para la salud de la población en Alemania sigue siendo "muy elevado" debido a las cifras, a pesar de todo, demasiado altas y la propagación de algunas variantes del SARS-CoV-2.
Alemania acumula desde el inicio de la pandemia 3.635.162 positivos y 87.128 muertos con o por covid-19.
Alrededor de 3.374.600 personas constan como recuperadas tras pasar el coronavirus, mientras los casos activos se sitúan actualmente en unos 173.500.
El jueves se encontraban ingresados en las unidades de cuidados intensivos 3.594 pacientes con covid-19 - lo que supone 114 menos en un día-, y de ellos 2.279 -el 63 % y 75 menos respecto al miércoles- están con respiración asistida, según el registro de la Asociación Interdisciplinar Alemana de Cuidados Intensivos y Medicina de Urgencia (DIVI).
En un día las ucis recibieron 354 nuevos pacientes con covid-19 y 110 de los ingresados murieron.
Hasta el miércoles habían recibido la pauta completa de la vacuna 10.432.968 personas, el 12,5 % de la población, y 32.258.912 (el 38,8 %), la primera dosis.