como la inmensa mayoría, tenemos las miras puestas en las vacaciones. Un año en el que, por fortuna, vamos a poder tener más opciones que el anterior para pensar dónde queremos ir y cómo. Es cierto que la crisis sanitaria ha hecho estragos en muchos sectores, especialmente en el turístico, pero si hay un tipo de turismo que se ha visto beneficiado con creces es el caravaning. ¿Quién no ha soñado alguna vez con viajar sin destino fijo y pernoctar en aquellos lugares paradisíacos que ofrece la naturaleza? No obstante, todos aquellos que aman llevar la casa a cuestas cuando viajan aseguran que no todo es tan fácil, pero que merece mucho la pena.
“A ver, lo primero antes de alquilar o adquirir una caravana es que te guste o al menos que te haya picado el gusanillo de hacer algo diferente a lo que se hace normalmente. En este mundillo, lo amas o lo aborreces, no existen los términos medios”, explica Juan de Dios Gutiérrez, de Webcaravan.
La pandemia, en cierta manera, ha cambiado la forma de pensar, y a la hora de viajar se está optando por buscar sitios alejados de posibles aglomeraciones. Además, durante el confinamiento también se tuvo más tiempo para bucear por las redes sociales y encontrar instantáneas idílicas de vacaciones en autocaravanas o camper, eso también influyó. Ahora todo el mundo quiere sentir esa ansiada libertad y llegar a sitios donde pocos han pisado. Y todo ello ha derivado en que se esté viviendo otro boom en el mundo del caravaning.
“Yo creo que a consecuencia de la pandemia la demanda se ha ido incrementado en porcentajes altísimos, sobre todo en jóvenes entre los 25 y 35 años. Parece que ahora hay más personas que se están animando a probar el viajar en autocaravana por la libertad que te puede dar el ir modificando el itinerario de la ruta sobre la marcha”, asegura Manuel piñero, responsable de Costaluzcaravan. Piñero es una de las muchísimas personas que se aficionó a las autocaravas y quedó prendado de ese ambiente hasta hacerlo parte de su vida. “Empecé a tenerlo como hobby, y ahora estamos ampliando la flota de autocaravanas, aunque no es mi trabajo principal”.
Estefanía Gutiérrez se tiró de lleno a la piscina y directamente adquirió una furgoneta camperizada porque “le da la vida”. Aunque eso sí, recomienda tener paciencia si quieres comprar una furgoneta y adaptarla a una vivienda para viajar porque “o eres muy manitas o tienes que esperar más de un año a que una empresa especializada te la deje perfecta”.
La mayoría de las personas que han probado o tienen una autocaravana o camper señalan a las diferentes normativas y medidas municipales para acampar y aparcar como el principal y casi único problema de viajar con este tipo de vehículos. “Con tanto boom lo lógico es que nos facilitasen el servicio, y nada. Todo lo contrario, no nos tienen en cuenta”, apunta Estefanía, quien además añade que cada vez es más complicado porque te llegan “recetas” por todo, haciendo referencia a las multas por aparcar fuera de las áreas establecidas. Por su parte, Juan deDios lamenta que cada vez en la provincia de Cádiz esté más complicado poder pernoctar en determinadas zonas y esto lo achaca a que “años atrás se ha abusado mucho, y ahora hay muchos municipios que no te dejan aparcar si no es en sitios delimitado. Fuera de Andalucía, sobre todo por el norte, te dan más facilidades”.
¿Qué poner en prácticar el caravaning te da experiencias únicas?, pues un sí rotundo, esas son las palabras de Laura Díez. “La gran ventaja es que cada día podrás conocer atardeceres únicos y diferentes. Estar en la playa y al día siguiente recorrer una montaña. Esto sólo te lo da este estilo de vida o turismo”.
Claves para la primera vez que alquiles una autocaravana para viajar
La mayoría de empresas de alquiler de autocaravanas coinciden en que si quieres irte de vacaciones en una de ellas este verano, vas tarde. Normalmente las reservas para temporada alta se llegan a hacer hasta con tres meses de antelación, a veces incluso de un año para otro. Si aún así has logrado hacerte con una, deberás descargarte una de las diferentes aplicaciones que hay para smarthphones y que resultan imprescindibles para conocer las áreas habilitadas para acampar, así como posibles rutas. En cuanto al precio, el alquiler durante los meses estivales ronda entre los 150 a 180 euros. Entre las condiciones que suelen exigir está la de ser mayor de 25 años y tener más de dos años de carnet B.
