Veinticinco familias de toda España, en su mayoría de procedencia extranjera, han elegido pueblos de la provincia de Málaga en riesgo de despoblamiento para cambiar su residencia en los próximos meses y teletrabajar o emprender sus negocios en ellos, según ha informado este domingo la Diputación malagueña.
Se trata de una experiencia pionera cuyo objetivo es alcanzar desde la alianza nuevas formas en la búsqueda de soluciones al reto demográfico
Esta decisión ha sido posible gracias a la plataforma "Vente a vivir a un pueblo", que presenta 80 destinos españoles -18 de ellos en Málaga- y el proyecto de mediación surgido en el centro La Noria de la Diputación de Málaga con la labor de Cruz Roja "Mi entorno se recupera contigo", que apoya a los ayuntamientos para tramitar las solicitudes.
La responsable de la Delegación de Innovación Social y Despoblamiento de la Diputación de Málaga, Natacha Rivas, ha presentado de forma virtual el balance de ambas iniciativas a una treintena de responsables municipales, junto al director de la plataforma "Vente a vivir a un pueblo", Ramón Pradera, y la gestora de proyectos en la Asamblea de la Cruz Roja en Málaga, Paula Rodríguez.
Alcaucín, Alfarnate, Alfarnatejo, Algatocín, Alpandeire, Benarrabá, Benadalid, Benalauría, Casarabonela, Cortes de la Frontera, Cuevas de San Marcos, El Burgo, Faraján, Gaucín, Genalguacil, Jimera de Líbar, Jubrique y Yunquera son los destinos disponibles.
Desde noviembre del pasado año hasta el pasado 30 de junio han recibido un total de 344 solicitudes de personas interesadas en cambiar su residencia.
En total, se trata de 246 familias interesadas, con una media de edad de 36 años, y el 64% de los solicitantes incluyen a menores de edad con una media de 1,8 hijos por familia.
Respecto a la procedencia de estos potenciales repobladores, la gestora de proyectos en Cruz Roja, Paula Rodríguez, ha explicado que provienen de países latinoamericanos como Argentina, República Dominicana, Chile, Colombia, Uruguay, Perú, Venezuela y México, y también de Inglaterra, Letonia, Alemania y Portugal.
En cuanto a las solicitudes de españoles, por este orden, son de Barcelona, Málaga, Madrid, Cádiz, Valencia, Pontevedra, Toledo, Las Palmas, Murcia, Sevilla, Alicante y Tenerife.
Ha explicado que se ha conseguido el cambio o perspectiva de cambio de nueve familias en seis meses, con un total de 23 personas, de las que tres son de Málaga y el resto de Valencia, Castellón, Canarias, Madrid, Galicia y Cádiz.
En cuanto a las motivaciones, una de las familias quiere teletrabajar y el resto tienen proyectos de emprendimiento en el sector agrícola, a través de acuerdos con el Ayuntamiento, en la artesanía, el calzado, el mundo textil o el de la chapa y pintura.
"Ahora mismo estamos trabajando con 16 familias, de las cuales, la mayoría responden a perfiles de emprendimiento y teletrabajo, pero también buscan un empleo por cuenta ajena, una jubilación tranquila y otra familia que busca la tranquilidad aunque se desplacen para llegar a su lugar de trabajo”, ha indicado Rodríguez.
Por tanto, son 25 las familias que han cambiado o se encuentran en proceso de cambio de residencia, ha precisado.
Las principales motivaciones para cambiar de residencia a un pueblo van en relación a “encontrar viviendas asequibles, servicios, buenas comunicaciones, calidad de vida, cercanía con sus vecinos y conexión a la red”.