Investigadores de la Universidad de Alicante (UA) han detectado la presencia del alga asiática Rugulopteryx okamurae en la costa alicantina, una especie invasora localizada también en Almería y Granada, entre otras zonas del país, por lo que no se descarta que pudiera extenderse por el resto del Mediterráneo.
Esta especie, que amenaza la biodiversidad, el turismo y la pesca, ha sido identificada en grandes cantidades en los fondos marinos cercanos a las playas de San Gabriel y Urbanova y, en menor proporción, en zonas turísticas más lejanas, como los Arenales del Sol y las calas del Cabo de Santa Pola por investigadores del Departamento de Ciencias de Mar y Biología Aplicada, del Departamento de Ciencias Ambientales y Recursos Naturales y del Centro de Investigación Marina de Santa Pola (Cimar) de la Universidad de Alicante (UA)
La rebautizada como “alga asiática” es una especie de amplia distribución en el Pacífico asiático, que se ha introducido recientemente en el mar Mediterráneo mostrando un comportamiento invasor.
"En España apareció primero en los arribazones de las playas de Ceuta a finales de 2015 y se ha extendido por todo el Mar de Alborán, donde ha mostrado una gran capacidad colonizadora, afectando negativamente a las especies marinas nativas, así como a la pesca artesanal y al turismo", según los investigadores de la UA.
De hecho, forma grandes acúmulos en las playas, de difícil gestión y retirada por parte de los ayuntamientos afectados.
"Recientemente, también se ha detectado en las islas Canarias, así como en Almería y Granada, y se prevé una rápida expansión por el resto del Mediterráneo. Debido a esas características, fue declarada especie exótica invasora y se estableció una estrategia para su seguimiento y control a nivel nacional", han señalado los expertos, según un comunicado de la UA.
En la costa alicantina, el alga se ha observado por primera vez y en grandes cantidades en muestras recolectadas por los estudiantes y docentes de la asignatura de Zoología Marina del Grado de Ciencias del Mar de la UA durante unas prácticas realizadas a principios de marzo pasado.
A raíz del hallazgo, los investigadores de la UA identificaron el alga mediante una caracterización morfológica y molecular. Además, realizaron una prospección rápida para evaluar la extensión y abundancia de esta alga en la zona submarina, así como en los acúmulos o arribazones de las playas.
Actualmente, según observan los expertos, el alga se encuentra en gran abundancia en el centro de la bahía de Alicante creciendo, principalmente, sobre la mata muerta de Posidonia oceánica que abunda en la zona.
Los investigadores han hallado grandes cantidades de Rugulopteryx okamurae en los fondos marinos, acumulándose en algunas playas cercanas, como en San Gabriel y Urbanova, pero también en otras playas turísticas más lejanas, como Arenales y calas del Cabo de Santa Pola, dispersada por el oleaje y las corrientes marinas.
Según la nota de prensa de la UA, "estos resultados confirman la expansión de esta alga por el Mediterráneo y acentúan la importancia de llevar a cabo estudios de seguimiento para determinar la variación de su abundancia a lo largo del tiempo en los sitios ya colonizados y detectar su expansión a zonas cercanas, así como analizar su potencial efecto sobre las especies nativas de nuestro litoral e implementar las medidas pertinentes para el control de su expansión".