Sólo Vera+Cruz salió a la calle, una vez despejado de lluvia el horizonte. En sus templos se quedaron La Palma, Nazareno del Amor y Prendimiento.
La Palma
El día grande del barrio de la Viña quedó empañado por culpa de la lluvia. Todo estaba preparado para recibir al Santísimo Cristo de la Misericordia y a María Santísima de las Penas, de la Archicofradía de la Palma, pero el tiempo jugó una mala pasada.
Justo cuando la Cruz de Guía tenía previsto cruzar el dintel del templo, las precipitaciones hicieron acto de presencia. No llovía con intensidad, pero sí lo suficiente como para que la junta de gobierno decidiera sabiamente no realizar la estación de penitencia en la Santa Iglesia Catedral.
Así, sin pedir unos minutos de plazo, el hermano mayor de la corporación, Manuel Rodríguez, se dirigió a los hermanos para comunicar la mala noticia.
Nazareno del Amor
Intensa jornada la que se iba a vivir ayer en la preciosa y céntrica plaza gaditana de San Francisco. Los naranjos, atestados de azahar, querían recibir al Señor del Amor y a su Madre de la Esperanza, pero la lluvia truncó los deseos de todos sus fieles y cofrades gaditanos en general. Una fina cortina de agua a la hora de la salida hizo que la junta de gobierno retrasara unos minutos la decisión. Eso sí, en el caso de salir a la calle tenían claro que la visita a la residencia de ancianos Alvernia tendría que suprimirse para ganar tiempo. Finalmente, nada fue posible. La hermandad decidía no salir al filo de las 16.30 horas.
Prendimiento
Si en la Viña es día grande, también lo era en otro de los barrios castizos del centro: El Mentidero. Lo que iba a ser una preciosa salida a la balconada de la Alameda se tornó en un día gris. Palma y Nazareno del Amor había comunicado ya su decisión de no hacer estación de penitencia, y el Prendimiento aún tenía esperanza de poner sus pasos en la calle. La junta de gobierno decidió retrasar la salida media hora, para comunicar finalmente a los hermanos que lo mejor sería quedarse en casa por este año. A las cinco de la tarde, a las puertas del Carmen estaba cayendo un gran aguacero que hacía presagiar lo peor. Cuando la hermana mayor, Rosa de la Jara, comunicó finalmente que la hermandad no saldría, los hermanos arrancaron a aplaudir en señal de apoyo a la sabia decisión adoptada por la junta de gobierno.
Vera+Cruz
El broche de oro del Lunes Santo siempre lo pone la primera cofradía de negro de la Semana Mayor Gaditana: La Vera-Cruz. Fue la única hermandad que se salvó de la catástrofe del Lunes Santo y, por lo tanto, fue la única en hacer estación de penitencia. Esta hermandad derrocha buen gusto por los cuatro costados. La salida de este año fue más especial que nunca. El Señor no pudo presidir los cultos cuaresmales por su exitosa restauración, pero sí se pudo contemplar en la calle. Su bello paso dorado fue foco de las miradas, así como la preciosa corona de espinas y cruz arbórea que estrenó este año. La plaza enmudeció y sonó la capilla musical Getsemaní. El Señor miró de reojo la plaza que desde hace muy poco lleva su nombre.
