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Manuel Pereira fue acribillado con una navaja de escaso tamaño hasta morir

La Policía descarta el robo y cree que entre ellos había ?una relación de otro tipo?. El presunto asesino ?no llevaba nada encima? cuando fue detenido, sólo el arma homicida con el que asestó más de 30 puñaladas al funcionario municipal.

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  • Momento en que el cadáver es introducido en el furgón. En el recuadro, Manuel Pereira -
Manuel Pereira Fontao, funcionario del Ayuntamiento de San Fernando que falleció en la tarde de este sábado, no recibió cuatro puñaladas como se pensaba tras la primera inspección ocular de su cadáver, sino que fue prácticamente cosido a navajazos por el presunto homicida, un joven de 24 años de edad natural de Tarragona que había llegado a San Fernando para “empezar” una nueva vida y que se compró una navaja “para protegerse”, con la que bien pudo cometer el crimen por el que está detenido en los calabozos de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía isleña.

Recibió cortes por todo el cuerpo, incluido el cuello, por lo que pudo morir degollado. Hay que tener en cuenta que la navaja era de pequeño tamaño, lo que le tuvo que obligar a emplearse a fondo para conseguir el objetivo. Y lo que a la postre hizo que tardara lo suficiente para que a la Policía Local le diera tiempo a llegar.

El esclarecimiento de ese aspecto es determinante para la investigación, ya que en el caso de demostrarse que hubo ensañamiento, la acusación con la que salga del Juzgado el próximo martes podría ser la de asesinato y no la de homicidio, de la que se parte ahora. Al parecer fueron más de treinta puñaladas.

También está contrastado que el funcionario municipal, de 47 años de edad, pudo pedir auxilio, ya herido, por la ventana de su domicilio, lo que hizo que los vecinos llamaran a la Policía Local. Según testigos, Pereira estaba con la camiseta rota y lleno de sangre. Una vez personados en el número 55 de la calle General García de la Herrán, segundo C, los agentes se percataron de que salía sangre por debajo de la puerta, por lo que llamaron a los Bomberos.

Todas estas circunstancias hicieron que el presunto asesino no hubiera escapado todavía del lugar del crimen, lo que intentó hacer al percatarse de la presencia policial saliendo por la ventana y encaramándose a la azotea.

La detención
Allí fue detenido por los agentes, a los que se enfrentó blandiendo la navaja, hasta que fue encañonado y se rindió diciendo que se iba a arrojar al vacío si lo arrestaban. Se da la circunstancia de que el presunto homicida conocía la ciudad, ya que había sido soldado profesional en San Fernando.

El comisario jefe provincial de la Policía Nacional, José María Deira, explicó tras el trascurso de un acto en el cuartel de la Guardia Civil de Cádiz que aún quedan muchos cabos sueltos para hacer una reconstrucción exacta de lo sucedido, aunque resaltó la enorme efectividad de este caso en concreto, gracias a la colaboración ciudadana.

“Gracias a los vecinos pudimos detener al autor de los hechos prácticamente in franganti, de otra manera dudo mucho que lo hubiéramos conseguido, porque no había ninguna relación entre la víctima y el agresor”.

Deira informó de que el supuesto asesino se había desplazado hace unos días hasta San Fernando buscando encauzar su vida. “Al parecer, conocía el municipio porque había pasado un tiempo como soldado profesional. Entró antes de ayer (por el viernes) a un chat de internet y conoció al funcionario, quedó con él para ayer (por el sábado) por la tarde y a partir de ahí tenemos que esperar a la declaración del presunto asesino”.

La Policía ha descartado el robo como móvil del crimen. “Creemos que había una relación entre ellos de otro tipo. Ahora vamos a realizar una inspección ocular en la habitación del hostal donde estaba hospedado el supuesto asesino y haremos lo mismo en la vivienda de la víctima”.

Según las declaraciones del comisario provincial de Cádiz, el supuesto autor del crimen “no llevaba nada encima, sólo una navaja que fue el arma homicida y él mismo ha confesado que la compró hace unos días para ir por la calle más tranquilo”.

Concentración este martes
El Ayuntamiento de San Fernando ha convocado una concentración de repulsa del brutal asesinato del funcionario Manuel Pereira Fontao, fallecido el pasado sábado. En el transcurso de la misma habrá cinco minutos de silencio en solidaridad con sus familiares y amigos. La concentración tendrá lugar este martes 2 de noviembre a las 17.00 horas en la plaza del Rey, junto al atrio del Ayuntamiento.

El alcalde de San Fernando, Manuel María de Bernardo, ha informado a través de un comunicado de prensa que dicha acción se ha acordado tras las conversaciones mantenidas con los presidentes de la Junta de Personal y del Comité de Empresa del Ayuntamiento a través de sus respectivos presidentes, Manuel Aragón Garcés y Sebastián Rey Candón.

Ambos representantes sindicales han reiterado el profundo dolor que todos los trabajadores han sentido al conocer la noticia. Asimismo han tenido palabras de elogio sobre los “altos valores humanos y profesionales” de Manuel Pereira destacando “su permanente capacidad de servicio y entrega a la ciudad, al Ayuntamiento y a los compañeros”. Algunos funcionarios intentan que se decrete un día de luto a nivel local, como se hizo en el caso de otro dramático asesinato en el 2000 sobre la persona de Clara García.


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