La función era a beneficio de los jóvenes isleños Carlos Pita y Yasmina Alcolea. El primero de ellos tiene cuatro años y padece parálisis cerebral, por lo que se están recaudando fondos para que se le puede practicar en Galicia un tratamiento basado en la hormona del crecimiento, mientras que en el caso de Yasmina padece una ataxia de Fiedreich de la que se está tratando en una clínica en Alemania.
Alex no defraudó a un público que sabía a lo que iba pero que como él mismo dice en el escenario, si el que está arriba no sabe sorprenderlo, poco ha conseguido yendo al teatro.
Las familias de Carlos Pita y Yazmina Alcolea han agradecido en dos comparecencias de prensa la participación del artista isleño en este evento y de manera totalmente altruista, que no se lo pensó dos veces cuando se le propuso la iniciativa.