De estos accidentes, las cifras oficiales indican que trece fueron mortales, pero los dirigentes del sindicato elevan la cifra de la tragedia a 16 fallecidos, al contabilizar también dos accidentes ocurridos in intinere -de camino al trabajo- y la muerte de un trabajador que resultó inicialmente quemado y perdió la vida días después. En este triste ránking, Huelva se sitúa como la tercera provincia andaluza en número de muertes en el trabajo el pasado año.
De esta forma, en 2008 los accidentes que se cobraron la vida de los trabajadores en el tajo en la provincia de Huelva se incrementaron con respecto a 2007 en un 44,4 por ciento, una subida que adquiere un tinte dramático en el sector de la construcción, donde los siniestros mortales se elevaron un 300 por ciento, desde los dos ocurridos en 2007 hasta los ocho registrados el año pasado.
Línea ascendente
En cuanto al total de accidentes ocurrido en Huelva, según los datos desgranados por UGT, se mantiene una línea ascendente casi plana, desde al año 2000 que era de 9.100 accidentes, pasando a 11.504 en el año 2005, teniendo un repunte importante en el año 2007 para volver a caer en el año 2008. Del mismo modo esta estadística, destaca la gran bajada que han tenido los accidentes graves desde el año 2004, ya que han pasado de 165 a 139 en un periodo en el que el año 2007 fue el peor de todos.
En cuanto al perfil de los trabajadores que sufrieron accidentes laborales en 2008, el informe de UGT indica que la edad que más sufre accidentes laborales está entre 25 y 34 años, además, los siniestros se ceban con los trabajadores con menos de doce meses en la empresa, ya que quienes tienen un trabajo temporal también se sitúan en el índice con mayores accidentes laborales.
Por lo que respecta al mes y medio que va de 2009, el panorama no es muy halagüeño, ya que de los accidentes mortales ocurridos en Andalucía, uno ha tenido lugar en Huelva.
Falta de medios de inspección y prevención
Jorge Puente, aseguró ayer que una de las principales causas de la siniestralidad es la falta de cultura preventiva y, sobre todo, “la falta de medios en las inspecciones de trabajo y la insuficiencia de técnicos de prevención de riegos que puedan acudir a los centros de trabajo y formar a las empresas y a los trabajadores, así como controlar y obligar al uso de las medidas de seguridad para salvar vidas”.
La precariedad laboral, la principal causa
La precariedad laboral, la temporalidad de los contratos y la subcontatación de servicios para abaratar costes son las principales causas que están detrás de la siniestralidad laboral según el secretario provincial de UGT, que su temor por el hecho de que “ante la crisis las empresas ahorran costes en las medidas de prevención y eso lleva a los accidentes”.
