La Delegación territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta espera que las negociaciones con la empresa Pascual lleguen a buen puerto y se pueda renovar el concierto entre la Junta y el hospital de Villamartín Virgen de las Montañas. Con el este centro hospitalario concertado y los centros de salud públicos, el mapa asistencial en la comarca estaría cubierto, pero, de no cerrarse la renovación del acuerdo, la Junta estudiaría la construcción de un hospital público.
Hace unos días el vicepresidente andaluz, Manuel Jiménez Barrios, esperaba que las negociaciones se culminaran con éxito, para lo cual a priori Pascual tendría que abaratar el importe del concierto. Además, se tendría que dar una serie de condiciones de legalidad y que ambas partes estén de acuerdo. Por lo pronto, ya se ha cumplido el año sin concierto con el centro hospitalario, lo cual, por otro lado, no ha mermado presuntamente la asistencia.
Como novedad, Arcos ha puesto a disposición de la Junta, llegado el caso, unos terrenos para la ejecución del proyecto; ofrecimiento que ha sido bien recibido por la propia Junta, como reconocía en su última visita a Arcos el delegado territorial del ramo, Manuel Herrera. No obstante, el mismo admitía que lo primero es intentar renovar el concierto, ya que esta situación no solo afecta al Virgen de las Montañas de Villamartín, sino a otros hospitales propiedad del grupo Pascual, caso de los de Sanlúcar y El Puerto de Santa María. Sin embargo, Herrera aseguró que el principal objetivo de la Consejería de Salud es garantizar la asistencia al usuario.
A partir de ahí, y si no hay acuerdo, se comenzaría a estudiar la construcción de un nuevo hospital, cuya ubicación ya comienza a resucitar un viejo debate, ya que Arcos de la Frontera apuesta por el proyecto al ser el municipio con el mayor número de habitantes de la Sierra, como ya ocurriera en los años noventa cuando se construyó el hospital privado de Villamartín.
