La sequía está golpeando con fuerza a Andalucía, dejando atrás embalses mermados y campos sedientos. En contraste notable, la presa de Alqueva en Portugal se yergue como un titán hídrico, con reservas que eclipsan a las de toda Andalucía. La cifra habla por sí misma: a finales de septiembre de 2023, Alqueva retenía 2.835,79 hectómetros cúbicos (hm3) de agua, representando el 68,3% de su capacidad total de 4.150 hm3. Esto supera, y casi dobla, la reserva hídrica acumulada de todas las cuencas hidrográficas españolas, que se encuentra en un 35,9% de su capacidad total.
Las diferencias son aún más marcadas cuando se compara con la situación específica de Andalucía. A pesar de una ligera entrada de agua en la primera semana de octubre, los embalses de la cuenca hidrográfica del Guadalquivir apenas alcanzaban los 1.455,62 hm3, un escaso 18,12% de su capacidad total de 8.034,22 hm3. Esto hace evidente que incluso un solo embalse portugués tiene más agua que todos los pantanos de toda la cuenca del Guadalquivir juntos.
La gravedad de la situación ha llevado al Parlamento Andaluz a tomar medidas, solicitando la intervención del Gobierno español. Se ha pedido oficialmente una cesión temporal de derechos de agua entre los usuarios de la presa de Alqueva y los de la demarcación hidrográfica del Tinto-Odiel-Piedras-Chanza. Con 100 votos a favor, cinco abstenciones y dos noes, el Parlamento de Andalucía ha instado al Gobierno a actuar rápidamente ante la "situación de extrema sequía" que sufre la provincia de Huelva.
El objetivo es claro: buscar soluciones a corto plazo mientras se trabaja en las infraestructuras y se reevalúan los acuerdos a largo plazo, como el Convenio de Albufeira, un acuerdo entre España y Portugal para la protección y el uso sostenible de las aguas de sus cuencas hidrográficas compartidas, firmado en 1998.
Y es que desde que se publicara en primicia la noticia en la que se divulgan los planteamientos del exdirector de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), Juan Saura, al respecto de que la solución al déficit hídrico del Parque Nacional y su entorno estaría en la vecina Portugal, desde la gran presa de Alqueva tanto en los periódicos VIVA como en ANDALUCÍA INFORMACIÓN, otros medios de comunicación nacionales y locales, así como agentes sociales y políticos se han hecho eco de la propuesta, que puede suponer un cambio radical en la situación de Doñana.
UNA COLABORACIÓN CLAVE
Es fundamental considerar la colaboración entre España y Portugal, ya que, a pesar de las reservas más abundantes de Portugal, también enfrenta desafíos de sequía. Alqueva, alimentado principalmente por aguas del río Guadiana, muestra una gestión del agua más resiliente, manteniendo niveles de agua que podrían ser cruciales para aliviar la intensa sequía que enfrenta Andalucía.
Comparativamente, mientras que la reserva de Alqueva se sitúa en el 68,3% de su capacidad, otras cuencas en España muestran niveles considerablemente más bajos. Esto demuestra una discrepancia notable y refuerza la urgencia de una solución colaborativa y bien negociada entre las partes.
Esta colaboración no sólo sería un acto de solidaridad y buena vecindad sino también una acción estratégica dentro de un marco de gestión de recursos compartidos y desafíos ambientales comunes. Además, dado que las necesidades de agua de Alqueva están cubiertas y hay un exceso considerable, una cesión temporal parece una solución práctica y beneficiosa para ambos países, que enfrentan los embates de la sequía y las incertidumbres climáticas.
Las deliberaciones en el Parlamento Andaluz han reflejado la gravedad y la urgencia de la situación, y también la disposición hacia una negociación y acción concertada. Las voces parlamentarias han enfatizado la necesidad de revisar y adaptar los acuerdos existentes, como el Convenio de Albufeira, para responder de manera más efectiva y adaptable a las cambiantes necesidades y desafíos hídricos.
Es claro que el estado actual de los embalses y cuencas hidrográficas exige acciones excepcionales y soluciones creativas. Frente a esta realidad, la cesión temporal de derechos de agua se presenta como una estrategia viable y necesaria para navegar a través de la actual crisis de sequía, mientras se preparan y ejecutan planes más amplios y sostenibles para el futuro de los recursos hídricos compartidos entre España y Portugal.
CASI UNANIMIDAD POLÍTICA
El Parlamento andaluz, en un acto de práctica unanimidad entre diferentes grupos políticos, ha decidido instar al Gobierno a solicitar una cesión temporal de derechos de agua de Portugal. Esta acción se presenta como una medida urgente y necesaria para combatir la "situación de extrema sequía" que azota la provincia de Huelva.
La parlamentaria del PP, Berta Centeno, destacó la importancia de esta decisión: "Entendemos que hay actuaciones a corto plazo que se pueden y se deben acometer para paliar esta gravísima situación actual que tenemos en Huelva", afirmó, recalcando la gravedad del problema y la necesidad de encontrar soluciones efectivas y rápidas.
Mario Jiménez, del Grupo Socialista, también dio su apoyo y resaltó el espíritu colaborativo manifestado: "Somos capaces de encontrar puntos de común en beneficio de la comunidad", dijo, evidenciando que la cooperación entre diferentes partidos políticos puede conducir a soluciones efectivas y beneficiosas.
Juan Antonio Delgado, de Por Andalucía, contribuyó al debate recordando que "primero habrá que revisar el convenio y después instar", y criticó posturas que consideró inconsistentes: "Aquí alguien miente o alguien no dice la verdad o alguien le falta datos".
Rafael Segovia, representante de Vox, mostró su apoyo principalmente a la propuesta y resaltó las deficiencias infraestructurales de Huelva: "Portugal tiene agua porque tiene la infraestructura que Huelva no tiene", expresó, subrayando la necesidad de acciones decisivas para superar la crisis hídrica que enfrenta la región.