El pasado 11 de febrero, la Junta de Andalucía anunciaba la
prohibición de los teléfonos móviles en las aulas hasta 2º de la ESO, una iniciativa que parece estar totalmente respaldada por la población andaluza.
Según los resultados del Barómetro Andaluz de diciembre de 2023, una abrumadora mayoría de los encuestados se muestran a favor de implementar restricciones en el uso de teléfonos móviles dentro de los centros educativos. Con un contundente respaldo del
92%, la opinión pública se inclina hacia la adopción de medidas para limitar el uso de estos dispositivos en las aulas.
El estudio revela que solo un
8% de los encuestados se mostraron en contra de esta medida, lo que refleja una amplia aceptación y apoyo por parte de la población andaluza hacia la regulación del uso de tecnología en entornos educativos.
Este resultado refleja una creciente preocupación por el impacto del uso excesivo de dispositivos móviles en el rendimiento académico y el desarrollo personal de los estudiantes.