El pasado 5 de diciembre, en el Centro Cívico del Barrio de San Francisco, se presentó el libro ‘La lista de Malva’ de Auxi Valle Arias. El acto fue presentado por Rebeca Muñoz, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Ronda, y tuvo una gran asistencia de público. Amablemente la autora se prestó a contestar una serie de preguntas relacionadas con su libro.
¿Cuánto tiempo llevas escribiendo?
–Al margen de este libro, yo sólo he escrito cosas para mí y algunas para compartirlas con mis amigos.
¿Te ha llevado mucho tiempo escribir el libro?
–Lo escribí en poco más de un mes, hace más de un año. Me coincidió, también, que estaba de vacaciones en Portugal y yo aprovechaba para hacer mi propio viaje mental a esta historia.
¿En qué te has inspirado para escribir el cuento?
–En esta historia tuve claro la trama desde el principio y que la protagonista iba a ser Malva, lo demás fue surgiendo en mi cabeza, al recordar cosas de mi infancia y algunas anécdotas que han vivido mis hijos, pero la mayoría son producto de mi imaginación.
¿Por qué has elegido este título para el libro?
–Porque tiene mucho que ver con la historia que cuento y además le viene genial la doble lectura que tiene la palabra “lista”.
¿Las ilustraciones son todas realizadas por ti?
–Sí, son 19 dibujos hechos con acuarela y rotring, tan sólo hay una carta con dibujos de corazones que le pedí a mi sobrinito que me lo hiciera, con su letra, para darle más veracidad.
¿Los personajes están basados en personas cercanas que han pasado por tu vida?
–Malva es el único personaje que tiene algo de mí, los demás son ficticios, aunque aquí haya cosas que ocurrieron en realidad.
¿Alguna anécdota?
–En este libro aproveché para hacer mi pequeño homenaje a algunas personas, en especial a todos los abuelos. Pero también aparecen algunos nombres importantes para mí, como el número 9 de la camiseta de fútbol de mi jugadora favorita, la descripción de la plaza de mi barrio o la de mi perra. Y además aparece una fecha, Martes 5 de Marzo, que se me quedó grabada cuando yo tenía 16 años, y tiene que ver con mi profesor de dibujo de aquel entonces, Cayetano Arroyo, quien me marcó mucho.
¿Qué mensaje quieres transmitir en este cuento?
–Que siempre hay que tener ilusión por algo, que hay pequeñas cosas o acciones que valen muchísimo, que el amor es muy poderoso.
