Títeres desde Abajo, la compañía que acapara buena parte de la actualidad informativa a causa de la polémica representación infantil del viernes por la tarde en Madrid, fue fundada en Granada, aunque como ellos mismos reconocen en su blog "No somos ni de aquí ni de allí, somos trotamundos y nos dejamos enamorar por la cultura popular que nos rodea".

A los dos jóvenes detenidos, miembros fundadores, se les acusa de enaltecimiento del terrorismo porque al final de la función un títere apareció con un cartel en el que se leía 'Gora Alka-ETA'. Eso colmó el vaso de la paciencia de varios de los padres presentes en la representación, incluida en la programación carnavalesca del Ayuntamiento de Madrid, que acabaron llamando a la Policía. Previamente, según testigos presenciales, en la obra se habían interpretado escenas como el ahorcamiento de un juez, el apuñalamiento de una monja y moría un policía.

Precisamente el último post en su perfil en la red social Facebook era una sinopsis del espectáculo que representarían en la tarde del viernes en Madrid y por el que finalmente han sido encarcelados por enaltecimiento del terrorismo. La obra, titulada "La Bruja y Don Cristóbal. A cada cerdo le llega su San Martín", se estrenaba en público en Madrid y, según la compañía, "como en anteriores espectáculos hemos querido investigar las posibilidades que nos aporta la tradición popular de títeres para contar aquello que sentimos como urgente".

Títeres desde Abajo afirma en Facebook que "en esta ocasión hemos revivido a Don Cristóbal Polichinela, personaje de la tradición popular prácticamente desaparecido en España y también hemos tomado prestado otro personaje de los cuentos populares, la Bruja. A lo largo del espectáculo, y bajo diferentes caras, Don Cristóbal tratará de aplastar a una bruja nada convencional, pero la naturaleza de ésta la lleva a amar su libertad por encima de todo y a no dejarse pisotear por nadie".

Por último, insta a asistir a la representación: "Si queréis pasar a verla haremos dos pases en la Plaza del Canal de Isabel II (plaza de las palomas) en tetuán a las 17 y 19 horas".

Según la agencia EFE, los dos jóvenes que ingresan en prisión son Raúl G.P., de 34 años y con antecedentes por robo con fuerza en 2002, y Alfonso L.F., de 29, que cita fuentes jurídicas.