Cádiz, la provincia más castigada por la lacra del desempleo a nivel nacional, no en vano y a pesar de cuatro meses de bajadas ininterrumpidas cuenta con más de 195.000 desempleados y más del 40% de su población sin empleo según la EPA, sí destaca en aumento del porcentaje de contratos que se están convirtiendo en indefinidos.
O lo que es lo mismo, el empleo de calidad y la estabilidad laboral es en lo que la provincia gaditana está destacando, ya que no lo hace en muchos nuevos contratos laborales que hagan reducir sus alarmantes cifras de demandantes de empleo.
Así, Randstad, empresa líder en soluciones de recursos humanos, señala en un estudio que la estabilidad laboral es el factor más importante para la mayoría de los trabajadores y ha querido analizar los últimos datos publicados por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) sobre la contratación indefinida, en cuyos datos de enero a mayo de 2013 en Andalucía se convirtieron en indefinidos un total de 21.400 contratos, lo que supone un aumento del 7,1% frente a los datos de la 2012 del mismo periodo de tiempo.
Cádiz se sitúa en cabeza a nivel nacional en este sentido y ha pasado de convertir 2.548 contratos a indefinidos entre enero y mayo de 2012 a los 2.981 del mismo periodo del presente año, lo cual supone un incremento del 17% (casi un 10% más que la media andaluza y más del 16% sobre la media nacional), solamente superado en el conjunto de la piel de toro por Granada, en la que el incremento de los contratos a indefinidos entre los cinco primeros meses del pasado año e idéntico periodo del corriente crecieron en un 19,7%.
Conjunto nacional
En España se convirtieron en indefinidos 166.765 contratos, lo que supone un ligero descenso del -0,4% frente a los 167.506 que se firmaron en el mismo periodo del año anterior. Por sexos, mientras que en los hombres bajó de 90.505 contratos a 89.083, en el caso de las mujeres aumentó en 681 personas, pasando de 77.001 a 77.682 contratos.
Conversión a indefinido
El estudio llevado a cabo por Randstad ha partido de diversas tipologías de contratos como son por obra o servicio, eventuales por circunstancias de la producción, interinidad, temporales de personas con discapacidad, de relevo, sustitución por jubilación, prácticas y formación, y que acabaron convirtiéndose en indefinidos. Eso sí, la comparativa no toma como referencia años naturales ni ejercicios, sino que compara los cinco primeros meses de 2012 y los meses comprendidos entre enero y mayo de 2013.