En el antiguo cementerio de San José continúan los trabajos de exhumación por parte de la asociación S.O.S. Bebés Robados Cádiz. Según exponen, han aparecido nuevas pruebas que evidencian el robo de bebés. De esta forma, en la sepultura número 5 han hallado una caja vacía, y en la número 45 falta tanto los restos del niño como la caja. "Las exhumaciones en San José nos siguen dando la razón. Después de meses de trabajo, nervios, ansiedad, tristeza, rabia y dolor van saliendo pruebas nuevas escondidas en el suelo de este viejo cementerio", aseguran en un comunicado.
"Cada sepultura que se abre es un mundo, la familia nunca sabe qué se va a encontrar. Entre una cuarentena de cajitas puede que esté el bebé enterrado con identificación de su pulserita, de un esparadrapo con el nombre de la madre, un trozo de mármol escrito, o puede que simplemente no haya ningún niño identificado. Pero el peor de los casos no es ese, es que en donde parece ser que está la cajita buscada, ésta aparezca completamente vacía, sin cenizas ni rastro de que allí se enterrara un bebé recién nacido", cuentan desde la asociación.
"No es la primera vez que nos encontramos ante un hecho parecido y aunque la familia recibe información de lo que puede ocurrir, nunca se está preparado para algo así". Son muchas las personas que buscan a familiares desaparecidos, ya que intentan localizar un total de 46 bebés robados. En el caso de Isabel busca a su hermana, nacida en 1981. Según cuentan "todo fue muy extraño, pues a la madre le dijeron que la niña estaba muerta en el vientre y ella se la seguía sintiendo hasta justo antes de nacer. La duermen y nadie ve nunca el cuerpo". Como causas de muerte aparecen la anoxia, que es falta de oxígeno durante el parto, y macerad,o que es fallecimiento dentro del vientre, "ambas contradictorias".
Isabel ha acudido a diario al cementerio durante el proceso de exhumación que ha durado varias semanas. Cuando tocaba llegar a su zona caliente (lugar probable de hallarse la caja buscada) aparece una caja de bebé completamente vacía. "Para Isabel fue una sorpresa, porque aunque ella sabía que algo raro ocurrió durante el nacimiento, siempre esperas que el cuerpo esté allí y poder cerrar la herida, junto con la duda de tantos años", comentan. "No solo está la posibilidad de que haya una caja vacía, sino de que falte un niño en el hoyo y no aparezca ni la caja, también nos había ocurrido en un par de sepulturas pero ha vuelto a pasar".
Se trata de un caso del año 1984 y aunque la caja está supuestamente localizada "resulta que se han olvidado enterrar un niño más en el hoyo, tenían que haber quince bebés y solo hay catorce. Nos preguntamos dónde está, si es de la familia que solicitó la exhumación o es de otra". Acompañando a la madre estaba Ana, su sobrina, que además es la psicóloga de la asociación. "Está haciendo una labor increíble de acompañamiento y asistencia a todos los familiares que acuden al cementerio, ella también pudo vivir en primera persona el sentimiento de la familia al encontrarse en tal situación, donde te quedas con la incertidumbre si te han podido robar a tu hijo o no. Y mientras siguen saliendo pruebas de robos en el suelo del cementerio gaditano, seguimos esperando el permiso del Ayuntamiento, para poder hacer ADN a los restos que ya se exhumaron hace unos meses".
Cabe recordar que las exhumaciones en esta zona del cementerio comenzaron a finales de 2017 de la mano de los arqueólogos Jorge Cepillo y José Gener. Se trata de la mayor exhumación de restos de recién nacidos realizada hasta ahora en España dentro de la trama de bebés robados. Los familiares llevaban esperando desde 2013 la apertura de este camposanto para buscar 46 supuestos “bebés robados”, y conocer así si los restos están en las cajas o si las familias deben continuar la búsqueda interminable de su paradero.