La Policía Local ha intensificado, con motivo de las fiestas navideñas, los controles de alcohol y drogas a conductores que realiza habitualmente todos los fines de semana. Concretamente, desde el pasado día 10, coincidiendo con la campaña que promueve la Dirección General de Tráfico (DGT) a nivel nacional, se ha practicado un total de 259 pruebas que han derivado en 19 sanciones, siendo remitidos cinco de ellos a la vía penal.
La finalidad de estos controles no es otra que la concienciación de todos los conductores para evitar unir el consumo de alcohol y drogas con la conducción de vehículos a motor y ciclomotores. Estos controles continuarán hasta la finalización de las fiestas.
La Policía Local ha recordado que las tasas de alcoholemia entre 0.25 y 0.50 llevan aparejadas multas de hasta 500 euros y la pérdida de cuatro puntos en el permiso de conducir. Entre 0,51 y 0,6 la multa aumenta a los 1.000 euros y los puntos se elevan a seis. Si el resultado fuese superior a 0,6 el conductor incurriría en un delito contra la seguridad vial, con penas de tres a seis meses de prisión o multa de seis a doce meses, o trabajos en beneficio de la comunidad de entre 31 y 90 días, y, en cualquier caso, la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo que oscila entre uno y cuatro años.
Si lo que se detecta es la presencia de drogas en el organismo, la multa es de 1.000 euros y la pérdida de puntos es de seis. Si se detecta la conducción bajo la influencia de estas sustancias se convertiría en un delito contra la seguridad vial, con las mismas penas que en el caso del alcohol.
A la fuga tras dar positivo
La Policía Local ha destacado una intervención realizada en la noche del lunes en colaboración con la Policía Local de San Fernando. Los hechos tuvieron lugar sobre las 22.00 horas en la plaza Asdrúbal, cuando un turismo golpeó a otro que estaba estacionado y se dio a la fuga. Un testigo ocular del accidente alertó a la Policía, facilitando datos sobre la matrícula y el modelo del vehículo. Según su relato, el vehículo circulaba a gran velocidad y de forma irregular, lo que hacía sospechar que el conductor estuviera bajo la influencia del alcohol o las drogas.
La Policía ha señalado que la aportación de este testigo fue imprescindible, ya que llegó a perseguir con su vehículo al causante de los daños, informando en todo momento de la dirección que seguía. Esto posibilitó que se diera aviso a la Policía Local de San Fernando, localidad hacia la que se dirigía el vehículo sospechoso. Así, los agentes de la localidad isleña consiguieron dar el alto al turismo en la avenida Pery Junquera, quedando el conductor bajo su custodia hasta que llegó una dotación de Cádiz.
Una vez en las dependencias de la Policía Local de Cádiz, se instruyeron diligencias por un presunto delito contra la seguridad vial, dando positivo en la prueba de alcoholemia el conductor, que ha quedado en situación de libertad con cargos.