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Cádiz

Asuntos Sociales concedió mas de 22.000 ayudas en 2020

Esta cifra de prestaciones supone un importe de 4.170.802 euros destinados a ayudas

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  • Un voluntario durante el turno de comidas en Elcano, en Cádiz, donde se confinaron personas sin hogar. -
  • Según un informe la prestación destinada al alquiler está a la cabeza con un total de 7.210
  • Debido a la pandemia el número de demandantes se ha incrementado

Más de 22.000 ayudas sociales, lo que supone un importe de 4.170.802 euros, concedieron los Servicios Sociales municipales del Ayuntamiento gaditano en el ejercicio del pasado año. Debido a la situación de crisis en la que nos encontramos por la pandemia, 2020 ha sido un año en el que el número de demandantes de ayudas se ha incrementado considerablemente. Desgraciadamente en 2021 la cifra sigue en alza.

Aunque hemos reforzado personal de los servicios sociales, seguimos, al igual que el resto de ayuntamientos, reclamando a las administraciones competentes, como son Estado y Junta de Andalucía, más recursos técnicos y más recursos de personal”

Según un informe al que ha tenido acceso este medio, la prestación destinada al alquiler está a la cabeza de todas. Se concedieron un total de 7.210 ayudas de este tipo, lo que se traduce en 2.708.389 euros. A esta le siguen las ayudas de suministros tanto de luz como de agua, 6.764 y 2.096 respectivamente.

La concejala de Asuntos Sociales, Helena Fernández, destaca las ayudas puestas en marcha durante el estado de alarma para cubrir las necesidades básicas. "Se trataba de una prestación propia del Ayuntamiento de Cádiz destinada a las familias más vulnerables, para que pudieran acceder a las necesidades básicas desde el mes de marzo hasta junio”. Fueron 2.342 prestaciones de este tipo lo que supuso una inversión de 324.694 euros.

Fernández también resalta “el incremento de las familias que demanda más información por parte de los asuntos sociales, algunas veces a título informativo, otras para la tramitación de alguna ayuda nueva o acceder a otro tipo de prestación. Ha habido un aumento considerable de las familias demandantes”. Señala que “a día de hoy estamos en un 60% de esa atención y lo que está pendiente estamos a dos o tres semanas vista. De manera que actualmente se están dando citas para marzo”.

La concejala recuerda que “los recursos son limitados”, y “aunque hemos reforzado personal de los servicios sociales, seguimos, al igual que el resto de ayuntamientos, reclamando a las administraciones competentes, como son Estado y Junta de Andalucía, más recursos técnicos y más recursos de personal”. Y es que ante el incremento de usuarios se hace necesario más personal. “El ayuntamiento está haciendo todo lo que está en sus manos pero necesitamos más apoyo económico para ello”.

Destaca además el aumento de trámites para otras administraciones. “Tanto el Estado como la Junta convocan ayudas de vivienda o tarjetas monedero, y todo ello pasa por la valoración previa de los servicios sociales. Por lo tanto, aunque no sean prestaciones propias la documentación así lo requiere y este trabajo cae sobre los servicios sociales municipales”, apunta.

La edil hace hincapié en que las ayudas de vivienda son prestaciones de carácter público, que están sometidas al derecho administrativo. “Por lo tanto tiene que haber un control de ese dinero público; no lo decimos nosotros sino el derecho administrativo. Toda ayuda requiere de una justificación. En principio, si todo va bien y la familia justifica mes a mes, en la mayoría de los casos vamos en el plazo correcto. Desde que la trabajadora mete la justificación y da la orden del siguiente pago, el plazo es aproximadamente de dos semanas”.

Helena Fernández explica que “tramitamos ayudas, pero es cierto que desde los servicios sociales no podemos complementar toda la ayuda que necesita una familia. Como servicios sociales tenemos competencia para dar las ayudas que el catalogo de servicios sociales y la ley nos dice; nunca vamos a llegar al cien por cien de lo que necesita una familia, ya que ofrecemos ayudas que son complementarias. Por ello esperamos que el resto de administraciones sea consciente de la crisis que se nos viene encima para que nosotros podamos seguir complementando”.

Por su parte el alcalde, José María González, apunta que "menos mal que esta crisis sanitaria no la ha afrontado la ciudad con un gobierno de derecha. Desde que comenzó la pandemia hemos puesto todos los esfuerzos necesarios para que nadie se quede atrás. Ahora mismo se invierte en Asuntos Sociales más que nunca. Y eso que el pasado año y el anterior nos dieron el premio a la excelencia en Asuntos Sociales por ser la segunda capital de España que más destinaba a este área. Pues bien, hemos aumentado la inversión social".

"Es verdad que el momento es complicado, que los servicios sociales de todas las ciudades están desbordados porque nunca antes se habían enfrentado a una pandemia mundial y a sus consecuencias sociales y sanitarias", reconoce el alcalde, "pero también es cierto que los trabajadores y trabajadoras se encuentran realizando una labor enorme. Son muchísimas ayudas que gestionar, en un momento complicado con mayor necesidad y parte del personal confinado". 

González señala que "no somos autocomplacientes. Hay mucho que mejorar, pero el salto ha sido grande y más si cabe en personas sin hogar, donde no existía absolutamente nada y hoy tenemos un censo, local para el desayuno, centro de día, campañas de calor y frío o el ejemplo de Elcano durante el Estado de Alarma". 

Además del aumento de las ayudas al alquiler o la atención domiciliaria, explica que "hemos incluso asumido competencias de otras administraciones, por ejemplo, la continuidad de los comedores escolares durante el Estado de Alarma o la adquisición de tablets para el alumnado en riesgo de exclusión y como forma de combatir la brecha digital". 

Y es que a las ayudas de alquiler y suministros, que son las más tramitadas, se suman otras destinadas a gastos hipotecarios, el plan Adultos Aprenden, tratamientos médicos, de alimentación o de material escolar y libros.

El alcalde concluye resaltando que la labor de Asuntos Sociales "la hacemos con un Ayuntamiento endeudado. Aunque la ecuación es sencilla. Lo que antes se despilfarraba en autobombo, publicidad, mamotretos y privilegios, actualmente se invierte en las personas".

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