Esta producción española de 75 minutos de duración obtuvo el premio Ondas 2011 al mejor documental. La entrada es gratuita, hasta completar el aforo.
El documental explica por qué los productos que compramos, sobre todo los electrónicos, duran cada vez menos y analiza la programación de caducidad de muchos de ellos para incrementar su consumo y, por tanto, su compra: baterías que duran 18 meses, impresoras que se bloquean cuando llegan a un determinado número de copias o bombillas que se funden a las mil horas. Rodada en Cataluña, Francia, Alemania, Estados Unidos y Ghana, un país africano que se ha convertido en el vertedero de la “basura electrónica” de Occidente.
Protagonizan esta cinta, entre otros, un técnico informático y sus problemas con una impresora, dos personas que demandaron a una multinacional informática por la corta vida de las baterías y un periodista de Ghana que expone la gran cantidad de residuos que llegan a su país y que se han quedado obsoletos de forma programada.